Tiene guasa que el debate político de esta campaña electoral haya sido, precisamente, el debate en televisión…
Este Sánchez es un tipo marrullero pero listo.
Y si aún hay quien cree que ese extraño debate sobre el debate le ha debilitado por su aparente miedo a no querer la confrontación de ideas, se equivoca…
Sánchez ha llevado la campaña a donde quería… A una especie de semifinal de Champions League que se jugará a doble partido y en la que él se lo va a jugar todo pero habiendo evitado el goteo malayo de una campaña que le perjudicaba… Y mucho. Todo vale, incluso pasar por tonto, menos hablar de España que es el debate auténtico.
Además, con este debate ficticio, ha evitado un debate televisivo a la vieja usanza le perjudicaba más todavía… No es tan tonto como creen algunos…
Esto solo puede ser premeditado…
-Verá
usted, señor guardia…
Como soy el Presidente, en estas elecciones no voy a ningún debate por mucho
que se quiera…
Bueno,
voy al debate si va Vox… Pero tiene que ser en A3…
Tampoco, ya no voy a A3… No va Vox
Voy a ir
a TVE… A la televisión pública… que es dónde tiene que ser…
Solo iré a uno de los debates… Se acabó la discusión..
Bueno, vale,
voy a A3 y TVE…
Lo pide el pueblo…
Dos debates iguales en 24 horas es una barbaridad en cualquier tratado de comunicación política… Pero a él le beneficia. Ha convertido, como digo, el mayor acto de campaña en una semifinal de Champions a doble partidos… Y, además, jugando el primero en casa que, como dicen ahora los entrenadores, es mejor…
¿Qué va a pasar en el partido de ida que se jugará esta noche en TVE?
Nada. Tanteo. Cerocerismo. Observar puntos débiles y cansar a la audiencia con el apoyo de su público, que para eso él es el que manda…
¿Y en el segundo?
En el de mañana martes y con la audiencia cansada, Sánchez aportará un parte de jugadas de estrategia. Dos como mucho. Para sorprender. Sabiendo que los goles en campo contrario valen el doble. Se conformará con meter uno y luego a esperar atrás… Encerrado y balones fuera… Mintiendo, si hace falta y dejando que pase el tiempo y el árbitro termine pitando el domingo el final del partido…
Que nadie se llame a engaño. Era lo previsto.
Al tiempo.