Seguro que os ha pasado mil veces, habéis ido a un restaurante a comer con la familia y los peques de la casa se han aburrido como otras o han causado desastres correteando por el local, hoy os traemos una solución para estas situaciones.
Los niños niños son y necesitan moverse y estar en una constante actividad física. Es por ello que hoy os vamos a recomendar un espacio en el que ellos pueden recrearse y vosotros degustar de una única y exquisita gastronomía, hablamos de Filandón, un restaurante campestre en plena ciudad de Madrid.
Su decoración es sencilla pero elegante y acogedora, el estilo que impera es el nórdico minimalista, sus paredes y suelos están revestidos de madera al igual que el resto del inmobiliario, tanto mesas como sillas y armarios, combinados con una fina mantelería blanca, esto en el interior, porque además ofrece servicio en su amplia terraza, la cual es un campo abierto. Aquí las mesas y sillas son de madera al mejor estilo de los cuentos infantiles, y hablando de temas infantiles el restaurante Filandón ofrece un divertido parque de juegos de madera para los peques de la casa, así los padres no os tendréis que preocupar de que corran por el lugar y rompan media vajilla.
Todo es cocinado al fuego para mantener el sabor y todas las propiedades nutritivas de los alimentos, el fuego es el eje central del concepto de este restaurante, los fogones están a la vista de todos los comensales y se sirven los más selectos productos, carnes y pescados frescos de excelente calidad. Los pescados son traídos desde Coruña, siempre realizando una selectiva elección de los productos del mar más frescos y asegurando que en el transporte se mantenga la misma temperatura de congelación. Sus verduras y legumbres también son las mejores de la huerta.
Este magnífico restaurante ideal para ir con toda la familia y pasar un rato agradable degustando la mejor gastronomía y los mejores y más frescos productos del mercado se encuentra en el Monte de El Prado.
Solo queda decir ¡Buen provecho!