Hay miles de motivos por los que una persona se plantea un cambio de vivienda. Ampliación en la familia, cercanía al trabajo, alejarnos del centro para buscar algo más de tranquilidad… Y, a todos ellos, en los últimos años se está sumando uno nuevo que seguramente no dejará de crecer: el de buscar un lugar más fresco por las temperaturas extremas.
Así lo destaca un análisis reciente de Fotocasa Research, en el que se recoge que la Comunidad de Madrid es la región donde más personas contemplan mudarse debido al clima, especialmente por las altas temperaturas veraniegas. Según los datos, el 42% de los demandantes de vivienda en Madrid están considerando un cambio de residencia por razones climáticas, lo que representa un incremento significativo en comparación con el 30% registrado en 2022. Este aumento se atribuye principalmente a quienes desean trasladarse a lugares con climas más fríos o suaves.
El caso de Madrid no es aislado, ya que en Andalucía, con un 32% de personas, o en Cataluña y la Comunidad Valenciana, con un 31% de posibles migrantes climáticos, también está aumentando esta idea. Además, especialmente en el caso de Madrid, los costes asociados con la climatización, como el uso prolongado de aire acondicionado en verano y calefacción en invierno, son mayores que en otras regiones.
Más predisposición entre los inquilinos
Como es lógico, los que más están considerando este cambio se encuentran los inquilinos, quienes por tener menos ataduras tienden a ser más propensos a mudarse. Un 38% de los demandantes de alquiler expresan su deseo de trasladarse por motivos climáticos, lo que representa un aumento respecto al 32% en 2022.
Dentro de este grupo, el 15% prefiere mudarse a lugares más fríos, mientras que el 14% busca temperaturas más suaves. En cambio, los compradores de vivienda muestran una menor propensión a mudarse, con un 28% considerando un cambio por razones climáticas, aunque esta cifra también ha aumentado desde el 25% en 2022.
El perfil de quienes desean cambiar de residencia por motivos climáticos muestra una ligera mayoría masculina, con un 53% de hombres frente al 47% de mujeres. Además, se observa que este grupo tiende a pertenecer a clases sociales de nivel medio-alto, y muchos de ellos viven con sus padres o con sus parejas e hijos, lo que sugiere que las decisiones de mudanza podrían estar influenciadas por consideraciones familiares y económicas.
Los ingresos también juegan un papel en esta decisión. Aquellos que ganan entre 1.001 y 1.500 euros al mes son los que más consideran mudarse, con un 16% expresando su deseo de buscar climas más favorables. Curiosamente, este mismo grupo es también el que más personas agrupa entre quienes no consideran mudarse, con un 13%.