El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, ha presentado este martes el nuevo modelo de horquilla empleado para delimitar y proteger los espacios reservados a los contenedores de gran capacidad de la ciudad para la recogida de residuos.
Este modelo mejorará sustancialmente tanto la protección como la propia imagen de estos entornos. Aunque el diseño es idéntico al actual, la horquilla que ha comenzado a instalarse en estos días es elástica y está conformada por una estructura tubular curvada con sistema flex que soporta empujes laterales por parte de los vehículos que estacionan junto a los situados sin que se produzca su rotura. Permite una oscilación de hasta 20 grados tras un impacto, después del cual retorna de manera automática a posición vertical.
Así, según ha explicado Carabante, “el sistema permite tres cosas: mantener adecuadamente el mobiliario, causar menos daño al vehículo que pueda impactar en la horquilla y ordenar los espacios en los que se ubican los contenedores de la ciudad, además de mejorar su estética y su impacto visual».
El proceso de sustitución comienza en Vicálvaro y Salamanca
El proceso para sustituir este elemento del mobiliario urbano de la capital ha arrancado en los distritos de Vicálvaro y Salamanca. Carabante, acompañado por el concejal delegado de Limpieza y Zonas Verdes, José Antonio Martínez Páramo, y por la concejala del distrito de Salamanca, Cayetana Hernández de la Riva, ha visitado este martes en el barrio de Fuente del Berro uno de los primeros puntos en los que se ha instalado la nueva horquilla.
Con esta actuación se solventa una situación que eventualmente se ha venido produciendo con estas horquillas en los espacios reservados a los contenedores, ya que con el modelo actual un fuerte impacto puede hacer saltar sus anclajes. A partir de ahora, sin embargo, no podrá darse esta circunstancia y que la horquilla quede desprendida en la vía pública. También supondrá un menor impacto sobre la carrocería de los vehículos que, al aparcar, puedan golpearse contra este elemento.
Las horquillas delimitadoras se instalarán en los puntos de contenedores de carga trasera y 800 litros de capacidad (para las fracciones envases, orgánica y resto no reciclable). En la actualidad hay aproximadamente 20.000 unidades de este tipo instalados en la ciudad, distribuidos en aproximadamente 4.000 puntos. La renovación de las 8.000 horquillas ubicadas en estos puntos está incluida dentro del “Contrato de contenerización, recogida y transporte de residuos de la ciudad de Madrid”, con una estimación de inversión de un millón de euros.
La previsión del Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad es que esta medida, unida a la próxima instalación de los centradores -dispositivos que se encajan en la base del contenedor y hacen que éste siempre se sitúe en la misma posición, evitando desplazamientos indeseados– mejoren notablemente las condiciones de los situados.
El 17% de los de carga lateral, ya renovados
La sustitución de este elemento de mejora coincide con el proceso de renovación de cerca de 30.000 contenedores de gran capacidad destinados a la recogida de cinco fracciones de residuos: envases (contenedor amarillo), papel-cartón (azul), vidrio (verde), orgánica (marrón), y resto de residuos no reciclables (naranja). Un plan que fue presentado el pasado mes de junio, y que avanza a buen ritmo según los datos que ha ofrecido Carabante esta mañana.
De hecho, en apenas dos meses, ya se han instalado 2.579 nuevos contenedores de carga lateral, lo que representa el 17,45 % del total. En los distritos de Vicálvaro y Villaverde ya se ha completado la renovación de todas las unidades previstas, 1.035 y 1.154 respectivamente, mientras que en Usera la cifra de recipientes sustituidos alcanza ya los 332, lo que representa el 35 % del total. Respecto a la renovación de los contenedores de carga superior, ya se han instalado 354 con el nuevo modelo, lo que supone el 2,29 % del total. Este proceso de renovación quedará completado en el primer trimestre de 2024. Entonces, se habrán sustituido los más de 12.000 contenedores de carga lateral de las fracciones envases, orgánica y resto no reciclable, y más de 17.000 de carga superior de las fracciones papel-cartón y vidrio, además de los nuevos puntos soterrados.
Soterrados en Salamanca y Centro
La renovación integral de los contenedores de la ciudad también contempla actuaciones para soterrar 30 puntos (papel-cartón, vidrio y envases) en el distrito Centro. Asimismo, en el distrito de Salamanca, se habrá completado la renovación de los de papel-cartón y vidrio de las 18 ubicaciones soterradas ya existentes a finales de este mes.
Estos nuevos contenedores Madrid 360, que han sido diseñados por la empresa Contenur en exclusiva para Madrid, son más accesibles y ergonómicos y tienen una altura homogénea de 150 centímetros, lo que permite que el vaciado y el mantenimiento sea más sencillo. Producidos con energía 100 % renovable, los elementos de estos nuevos recipientes pueden ser sustituidos por piezas sin afectar al conjunto y están diseñados para que se puedan recuperar sus materiales. Las unidades que se vayan retirando se reciclarán y servirán para fabricar las nuevas para favorecer la economía circular.
Esta renovación para toda la capital es una mejora del nuevo contrato de servicios de contenerización, recogida y transporte de residuos que fue aprobado en mayo de 2022 con una inversión de 1.506 millones de euros. Se trata de un nuevo servicio más sostenible en el transporte de los residuos, centrado en el fomento del reciclaje y la preparación para la reutilización, y puntero en innovación. En este sentido, en determinadas zonas y para determinadas fracciones de residuos, incorporan sensores de llenado que permiten programar el vaciado cuando se encuentran al 80 % de su capacidad máxima. Con esta tecnología se optimiza el servicio de recogida al precisar un menor número de camiones circulando por la ciudad para comprobar in situ el volumen de llenado y se evitan sobrellenados. Asimismo, disponen de odorizantes y dispositivos para detectar anomalías como desplazamientos o incendios de los recipientes.