Decir que fue una sorpresa que Mónica García se convirtiera en jefa de la oposición al Gobierno del PP tras las elecciones de hace dos años sería decir una verdad a medias, porque su relevancia en el tablero político regional llevaba tiempo advirtiéndonos de que sería una de las actrices principales en los próximos años. Pero ahora quiere ser directamente protagonista y relevar a Isabel Díaz Ayuso en Sol, con una propuesta focalizada en la sanidad pública, pero también en la vivienda, la economía o la cultura.

La primera pregunta es la que, entendemos, le hace presentarse a estas elecciones ¿Por qué hace falta un cambio en la Comunidad de Madrid?

Queremos el mejor Madrid posible, una Comunidad en la que todas las madrileñas y madrileños vivan mejor, una Comunidad con servicios públicos de calidad, con trabajos decentes, en la que todas las personas puedan tener una zona verde cerca y no se dejen más de medio sueldo en pagar un alquiler. 

Nuestra Comunidad necesita un gobierno que se preocupe de Madrid, que hable de Madrid y de los problemas de sus vecinos. Un gobierno del siglo XXI que ofrezca un mejor futuro a todas y todos, un Madrid con igualdad de oportunidades sin importar a quién votes, dónde vivas o de dónde vengas. 

Madrid necesita que la dejen de usar como escenario de confrontación con el gobierno central y el resto de España. A nosotras nos gusta Madrid, hacemos política por y para Madrid, trabajamos y hacemos propuestas para mejorar la vida a la gente aquí, en Madrid.  

Las últimas encuestas dibujan un escenario con una mayoría absoluta de Ayuso. ¿Qué van a hacer en esta recta final para cambiar la dinámica?

En Más Madrid nos presentamos a estas elecciones para ganar, no para ser los líderes de la oposición. Nosotras no damos el Gobierno de la Comunidad de Madrid por perdido, no vamos a bajar los brazos y vamos a dar la sorpresa. Nos queda una semana para cambiar Madrid y ponernos al frente de un gobierno feminista, verde y progresista que mejore la vida de los madrileños y madrileñas en cada barrio, distrito, pueblo y municipio de nuestra Comunidad.  

Las encuestas cada vez nos dan más y nos muestran dos cuestiones de manera clara, por un lado, vemos a un Más Madrid que no para de crecer y, por otro, tenemos a una señora Ayuso desgastada, que ha tocado techo y no tiene nada nuevo que ofrecer a Madrid. Somos la única alternativa progresista que puede poner fin a 28 años de lastre del Partido Popular. En esta recta final vamos a darlo todo para mandar a Ayuso a la oposición. 

Más Madrid ha llevado por bandera durante meses el estado de la sanidad pública en la región. ¿Qué proponen para darle un cambio en los próximos cuatro años si salen elegidos?

Los madrileños eligen el próximo 28 de mayo entre Sanidad o Ayuso. Hay que elegir entre tener cita de atención primaria antes de dos semanas o sus mentiras. Elegir entre tener pediatra y atención temprana para nuestros hijos, o su soberbia. 

Conozco la sanidad pública a la perfección, por eso queremos cuidar la joya de nuestra corona y devolverle el lugar que se merece. Queremos un cambio radical para recuperar y revitalizar la sanidad pública. Tenemos un plan sanitario con un financiamiento de 6.100 millones de euros para cuatro años, con el que vamos a recuperar el talento y lograr que nuestros profesionales regresen al sistema madrileño de salud, vamos a reducir un 40% las listas de espera, desprivatizar los servicios, construir 33 nuevos centros de salud, contratar más pediatras, enfermeras, médicos de familia y psicólogos.

La fiscalidad es también otro asunto del que distan mucho del propuesto por el actual Gobierno autonómico. ¿Recuperarían impuestos en caso de gobernar?

Nosotras queremos que Madrid deje de ser una guarida fiscal y que el gobierno de la señora Ayuso deje de regalar 4.500 millones de euros anuales a multimillonarios con sus rebajas fiscales. Cuando hablamos de fiscalidad o del modelo fiscal el debate no puede reducirse a los anuncios de subir o bajar impuestos, sino a qué o quién afectan esas bajadas de impuestos, y cómo afectan la vida cotidiana y los servicios públicos que tenemos. 

Las grandes fortunas tienen que arrimar el hombro para que dejemos de ser la Comunidad Autónoma con menos ingresos per cápita y que la mayoría de los madrileños viva mejor. El Madrid del siglo XXI necesita un modelo fiscal justo y progresivo, que provea a la administración de los recursos suficientes para que podamos hacer frente a los retos económicos y medio ambientales que tenemos enfrente.

La Comunidad de Madrid es cada vez menos accesible para las familias por el precio de la vivienda. ¿Cómo volver a ser una región amable y que alquilar o comprar no suponga, nunca mejor dicho, hipotecarse la vida?

Las familias, los jóvenes, los hogares monomarentales, las personas migrantes o cualquier persona que gane un salario medio en Madrid lo tiene cada vez más difícil para tener una vivienda digna, pagar un alquiler o hacer frente a la subida de la hipoteca. 

Para solucionar el problema de la vivienda hay que hacer todo lo contrario de lo que ha hecho Ayuso en Madrid. Es decir, limitar el precio del alquiler, regular, poner un freno a la especulación inmobiliaria, construir vivienda nueva, rehabilitar vivienda, movilizar la vivienda vacía y cumplir con el artículo 47 de la Constitución Política del Estado. 

Y también se han pronunciado últimamente sobre la necesidad de tomar medidas urgentes de actuación ante el cambio climático… ¿Qué hay que hacer para combatir las cada vez más frecuentes e intensas olas de calor?

Frente al negacionismo de Ayuso proponemos tomarnos en serio la emergencia climática que vive nuestra región, nuestro país y el planeta.

Apostamos por la creación de refugios climáticos por toda la región, reverdecer las ciudades y mejorar la eficiencia energética de los inmuebles para estar mejor adaptados a las olas de calor.

Además hay que combatir la contaminación con zonas de bajas emisiones en todas las grandes ciudades, redoblando la frecuencia y los trayectos del transporte público y apostando por las energías renovables.

La transición ecológica es una necesidad que necesitamos afrontar de manera decidida: Madrid no puede seguir arrastrando los pies para afrontar el mayor reto que tenemos por delante como sociedad.

¿Cuál es la primera medida que tomaría como presidenta de Madrid?

Hace que la sanidad pública vuelva a funcionar.

¿Y cómo le gustaría ver la Comunidad después de sus cuatro (u ocho) años de mandato?

Con el reloj de la Puerta del Sol en hora con el siglo XXI. Con los 50.000 empleos verdes que crearemos a través de nuestro “Plan Reindustria”, con alquileres asequibles tras ampliar el parque público de vivienda y regular los precios, con un sistema educativo robusto tras desmasificar las aulas y, por supuesto, con una sanidad pública que ha vuelto a tratar bien a sus pacientes y a sus profesionales.

No es un sueño inalcanzable. Aplicando las políticas adecuadas, desterrando la corrupción y aprovechando el enorme potencial de la Comunidad de Madrid es posible.

La izquierda en general se está fragmentando en varias marcas, tanto a nivel autonómico como nacional. ¿Es este un hándicap a la hora de disputar cualquier cita electoral?

Creo que el mayor handicap ocurre cuando la ciudadanía percibe que la política habla más de los partidos que de su vida cotidiana. Es un error que desde Más Madrid nos hemos cuidado mucho de no cometer y nos centramos -cuando hay y cuando no hay campaña- en el día a día de los madrileños y madrileñas: la cita en el centro de salud, la plaza en la escuela infantil, el trato a los mayores en las residencias, la puntualidad del transporte público…

Considero que es la mejor manera de llegar a una cita electoral, con los deberes hechos y con la tranquilidad de haber escuchado a los vecinos, recogido sus demandas y ofrecido soluciones

Pero siempre se puede llegar a pactos a posteriori… ¿Con quién está dispuesta a llegar a acuerdos? ¿Con qué condiciones?

Mi objetivo es liderar el primer gobierno progresista de este siglo en la Comunidad de Madrid. Será un orgullo y una enorme responsabilidad que llevaré a cabo pactando con el resto de fuerzas progresistas.

La única condición será trabajar para que Madrid deje de vivir por debajo de sus posibilidades: para que la sanidad vuelva a brillar, para que el ascensor social que un día representó la educación vuelva a funcionar y para que el acceso a la vivienda deje de ser una pesadilla.

¿Son estas elecciones un termómetro de lo que pueda pasar en las cada vez más cercanos comicios generales?

Hay muchas personas que ven estas elecciones como la antesala de las generales. Ayuso ha llegado a decir que se tratan de una primera vuelta. Yo niego la mayor. Madrid no es el aperitivo de nada. Madrid es el plato principal.

No me gusta que se rebaje la importancia de estas elecciones poniendo los ojos en la Moncloa. A mí me importan estas elecciones. Me importa la sanidad, la educación, la vivienda. Me importa Usera, Carabanchel, Vallecas. Me importa Getafe, Móstoles, Alcorcón. No hay nada más importante ahora mismo que el próximo domingo.

Siguiendo con la clave nacional, ¿qué valoración hacen de la llegada de Sumar y de la apuesta de Yolanda Díaz?

Es pública y notoria la buena sintonía, personal y política, que tenemos Yolanda Díaz y yo. Compartimos una manera de hacer política centrada en lo importante, más atentas a mejorar la vida de la gente que a cualquier otra cosa, huyendo de la política del zasca y cultivando la política de la escucha. Creo que como Ministra está haciendo un papel prodigioso y agradezco el apoyo que nos ha dado a mí y a Rita Maestre.

¿Qué propone Más Madrid en…?

Vivienda: Hacer una revolución de la vivienda asequible. Una revolución con dos C, construir y comprar, y dos R, rehabilitar y regular. Impulsaremos 8.000 viviendas asequibles y de calidad en alquiler a precios de entre 300 y 600 euros. Y también poniendo un impuesto a la especulación. 

Movilidad: Plan “Madrid a tiempo” para doblar el transporte público y que la gente llegue en la mitad de tiempo a su destino. Un Plan con 74 nuevas líneas de buses interurbanos para romper la radialidad y conectar bien las comarcas. La construcción de 8 intercambiadores comarcales en todas las vías de acceso a Madrid, la contratación de 3.500 trabajadores de Metro, la ampliación de la línea 2 de Metro para que llegue al barrio del Cañaveral y la línea 10 para que se prolongue por Alcorcón y llegue a Móstoles. Y la puesta en marcha de un Sistema de Bicimad regional con 2.500 bicicletas en 250 estaciones.

Emprendimiento: Convertiremos a Madrid en un referente del emprendimiento innovador, creando empleo de calidad con iniciativas nacidas de la I + D del sector tecnológico y con alto valor añadido, emprendimientos vinculados a la transición ecológica y a la economía de los cuidados.

Impuestos: Aplicar lo que dice la Constitución: quien más tiene que más pague. Madrid no puede seguir siendo una anomalía que hace regalos fiscales a los más ricos. Apostamos por impuestos progresivos y orientados a financiar de manera suficiente los servicios públicos.
Aplicar impuestos a los ricos como el resto de las Comunidades Autónomas para tener una mejor sanidad pública y mejores servicios para los madrileños. 

Medio Ambiente: Una sociedad más verde y sana. Con un gran Cinturón Verde que conecte corredores ecológicos. Reverdecer y renaturalizar la región, facilitando el acceso a zonas verdes con la premisa 3-30-300, para que cualquier persona pueda ver 3 árboles desde su ventana, tener un 30% de su barrio con superficie verde, y a una distancia de 300 metros de su casa una zona natural.

Familia: Decreto para familias monoparentales para reconocerles derechos y prestaciones. Plan de apoyo a las familias con ayudas para la conciliación, acceso a la vivienda y empleo para madres y padres jóvenes. Una renta de cuidados para madres y padres que tengan reducida su jornada laboral por cuidado de menores o personas dependientes. 

Educación: La educación es la columna vertebral de nuestra Comunidad. Bajaremos las ratios. Contrataremos a 10.000 profesores, pondremos comedores universales y gratuitos (de 3 a 12) en colegios públicos y concertados. Adaptaremos los Centros Educativos al  cambio climático con tejados llenos de placas solares, rehabilitando y climatizando, renaturalizando patios, pacificando entornos. Y por supuesto, cuidaremos de la salud mental de los alumnos y los docentes reforzando orientadores y protocolos. 

La última pregunta, una fácil (o no) ¿Qué es para usted ser madrileña?

Mi razón de ser.