Fueron la tabla de salvación de la hostelería durante los momentos más duros de la pandemia. Las terrazas de bares y restaurantes que florecieron en las calles de la capital ante la prohibición de consumir en los interiores y el cambio de regulación para que pudieran ocupar más espacio en las vías públicas fueron muy bien recibidas por los profesionales del sector y por muchos consumidores en general… pero no con tanto entusiasmo por los vecinos de las zonas afectadas.
Una guerra que aun hoy, con todas las restricciones levantadas, se mantiene. Y así seguirá durante, presumiblemente, bastante tiempo, en lugares de mucha afluencia de ocio como la calle Ponzano de Madrid, donde desaparecerá la mitad de las plazas de aparcamiento actuales por la ampliación de aceras y terrazas, según puede leerse en el Boletín Oficial del Ayuntamiento de Madrid.
«La remodelación de la calle Ponzano, en el tramo comprendido entre las calles Santa Engracia y Ríos Rosas, es uno de los proyectos prioritarios para el distrito de Chamberí, cuya ejecución supondrá la compatibilización de forma más eficiente de los usos actuales de esta vía publica a través de la renovación y ampliación de sus aceras», se indica en el BOAM.
La decisión ha caído como un jarro de agua fría no solo entre los vecinos de la zona, sino en las filas de la oposición del Ayuntamiento madrileño. La portavoz de Más Madrid, Rita Maestre, considera que detrás de esta decisión hay una intención de «hacer negocio» por parte del Gobierno municipal, mientras que desde el PSOE, Mar Espinar critica «que se quite espacio público para que se pongan terrazas en Ponzano».
En una entrevista en ‘Telemadrid’, Espinar ha reprochado a la vicealcaldesa, Begoña Villacís, que no escucha a la ciudadanía. «No no nos parece bien que se quite espacio público para que se pongan terrazas porque no lo quieren los vecinos. Quienes viven en Ponzano le piden a Begoña Villacís que quite las terrazas, que no se puede convivir», se ha lamentado.
Por su parte, la delegada de Seguridad y portavoz del Gobierno municipal, Inmaculada Sanz, asegura que «con la nueva normativa relativa a las terrazas lo que se produce es una recuperación de una parte de las plazas que anteriormente estaban dedicadas a las terrazas»
También ha dejado la puerta abierta a habilitar más plazas de aparcamiento en batería en determinadas zonas, para que la afección «sea la menor posible» y que sirva, además, para que los vecinos de la zona puedan disfrutar de un espacio peatonal más amplio, en un lugar que «era demasiado reducido para el tránsito que tiene habitualmente esa zona».
Imagen portada: Telemadrid