En medio de todo el debate sobre impuestos de cara a las elecciones del próximo 4M, resulta interesante detenerse en el estudio recién publicado «La competitividad fiscal de las comunidades autónomas. Condición necesaria para el desarrollo económico», que señala que Madrid es la comunidad autónoma con menor presión fiscal.
Madrid obtendría una presión de 87,6 puntos, la más favorable, seguida de los distintos territorios del País Vasco, y el peor resultado se da en Cataluña, donde el índice se elevaría hasta los 134,5 puntos.
En la presentación del estudio, el presidente del Instituto de Estudios Económicos, Íñigo Fernández de Mesa, ha señalado que la crisis de la covid ha intensificado «los graves problemas» de la economía española, con un aumento del déficit publico y de la deuda, que requerirá «tomarse en serio su reducción», para lo que es necesario generar crecimiento económico y empleo, y ha rechazado aumentar los impuestos «en un momento tan delicado».
Para Fernández de la Mesa, aumentar la imposición en seis puntos, como sugiere el Gobierno, es «negativo», y que subir los impuestos no siempre tiene un efecto positivo, porque desincentiva la inversión, y ha abogado por hace aflorar la economía sumergida. Asimismo, ha recordado que España cuenta con una presión fiscal normativa en 2020 diez puntos superior a la media de la Unión Europea (110 puntos frente a 100 del promedio de la UE).
Reducir impuestos, positivo
Fernández considera positivo dejar que los territorios puedan reducir los impuestos, puesto que existe una correlación clara entre un sistema fiscal eficiente y competitivo y un mayor crecimiento económico, lo que produce la paradoja de que territorios con impuestos más bajos consigan una mayor recaudación que aquellos otros que mantienen una tributación elevada.
Pone como ejemplo Madrid, donde, a pesar de sus bonificaciones, se recauda por el impuesto sobre Sucesiones y Donaciones una cantidad similar a la de Cataluña, que la supera en habitantes y tipos impositivos, y ello debido a que el número de donaciones en Madrid se ha incrementado muy significativamente desde que se introdujeron las bonificaciones.