El anuncio de Isabel Díaz Ayuso del adelanto electoral y la consecuente ruptura de su pacto de Gobierno con Ciudadanos, ha sumido a la formación naranja en una crisis en todo el territorio pero que tiene uno de sus epicentros en la región madrileña.

El último capítulo ha sido la dimisión de los diputados de Cs de la Asamblea, Sergio Brabezo y Marta Marbán, quienes además han acusado al exvicepresidente Ignacio Aguado de «presionar» al grupo parlamentario para firmar una moción de censura contra Isabel Díaz Ayuso que lo proponía como sustituto.

A través de su cuenta de Twitter, Brabezo ha denunciado que Cs Madrid «no solo intentó frenar la convocatoria de elecciones de forma torticera aliándose con el sanchismo, sino que a los diputados naranjas se nos presionó para firmar una moción de censura contra Ayuso», que proponía a Aguado como presidente.

El exparlamentario ha cargado contra Aguado después de que Cs «ha abandonado el centro y la moderación para empezar a tuitear de un modo radical», e «insultar personalmente» a la presidenta, «una compañera de Gobierno», ha dicho.

«Por todo ello, Ignacio Aguado no puede ser candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, ha aseverado Brabezo.

Por su parte, Marta Marbán también ha anunciado que abandona la formación naranja a través de una carta que ha publicado en su cuenta de Twitter, en la que indica que es «una decisión difícil, pero meditada, personal e individual», además de «consensuada» con su familia y sus amigos.

«No me identifico con lo que está pasando dentro de Ciudadanos y lo que no se comprende no se defiende», señala Marta Marbán.

Lamenta que no hayan aceptado «ni una pequeña representación de un pensamiento diferente dentro de Ciudadanos, unas voces distintas, unos cambios necesarios y constructivos».

Marbán se queja de que tras haber estado «un año predicando en el desierto», «encima los malos resultados precipitan decisiones erróneas como la moción de censura de Murcia».

Aguado sigue sin ser el candidato oficial a la presidencia

Todo ello, dentro de un momento de máxima tensión en Ciudadanos, con unas encuestas que apuntan a la posibilidad de que los naranjas no entren en la cámara, y todavía sin un candidato confirmado.

Y es que Ignacio Aguado aún no ha sido ratificado como cabeza de lista, y todo hace indicar que deberá superar unas primarias para que pueda ser refrendado.

Juan Carlos Bermejo, que ya fue rival de Aguado en 2018, ha confirmado que volverá a presentarse por segunda vez a las primarias de Ciudadanos para la presidencia de la Comunidad de Madrid, aunque ha asegurado que retiraría su candidatura para apoyar a Edmundo Bal en caso de que este último se presentase.

Bal ya ha asegurado sin embargo que no está subido a ese barco, y ante un planteamiento en este sentido por parte de Arrimadas ha contestado que «le diría que estoy muy contento en el grupo parlamentario y que mi deseo e intención sería quedarme aquí. Creo que hago un buen papel y es lo que me gustaría seguir haciendo».

Ni moción de censura ni trasvase al PP

En lo que sí ha sido categórico el portavoz de Cs es en negar de manera tajante que su partido haya presionado a sus diputados en la Asamblea de Madrid para promover una moción de censura, como ha denunciado Brabezo, así como de que tuvieran intención alguna de romper el Gobierno con Isabel Díaz Ayuso.

Bal también apunta a que las recientes «deserciones» en Ciudadanos, tanto a nivel estatal como regional, están vinculadas con el plan del PP de captación de cargos de Ciudadanos.

«Todo el mundo sabe que el PP tiene una oferta que hacer de cargos, de dinero, poder o puestecitos, y lo hace de una manera tan descarada».

Para Bal, todos aquellos que están atacando Ciudadanos desde el interior, en alusión a personas como Toni Cantó, que también ayer lo dejó todo, «son los dinamiteros del partido» y lo que buscan es «destruirlo desde dentro» con estrategias calculadas.

Ha insistido también de manera tajante en que igual que la líder del partido llamó al presidente del PP, Pablo Casado, para asegurarle que no habría mociones en Madrid y tampoco en Andalucía ni Castilla y León, recalcando que esos dos gobiernos en coalición con el PP que les quedan «no se rompen». 

Villacís ‘exculpa’ a Rivera

Por su lado, la vicealcaldesa de la capital, Begoña Villacís, ha afirmado que es «mentira» que el exlíder de su partido, Albert Rivera, esté haciendo maniobras para que cargos de la formación naranja se pasen al PP, porque «esté donde esté Albert, siempre va a ser Ciudadanos».

En declaraciones a los medios tras un acto de Reporteros Sin Fronteras, la vicealcaldesa ha remarcado que ella habla «bastantes veces» con Rivera, del que es amiga, y ha garantizado que «no está detrás» de la salida de personas de Cs al PP.

Sobre Aguado, además, ha afirmado que ha hecho «un gran trabajo» como vicepresidente de la región y sería «muy buen candidato» de la formación para las elecciones del 4 de mayo.

Villacís ha reiterado que «no» se pasará al PP ni a ningún otro partido aunque Cs desaparezca, sino que volvería a su antigua profesión, de la que está en excedencia. «Lo que te da la libertad en política es tener un sitio al que volver, tener una profesión».