El Pleno municipal ha aprobado este martes de forma definitiva la segunda modificación del Plan Especial para la parcela situada en la calle Antonio López (distrito de Usera), concretamente los números 109 y 111, que autoriza a la creación de un gran centro comercial en las inmediaciones de Madrid Río.
La propuesta ha sido validada por los votos del PP y el Pleno da así luz verde al dictamen que ya validó la comisión municipal de Urbanismo, que rechazó las 297 alegaciones presentadas en contra de este proyecto, que supone para la instalación accesos directos desde la M-30 y 1.500 plazas de aparcamiento. La superficie del ámbito es de más de 20.000 metros cuadrados.
En la pasada comisión municipal, PSOE e IU cargaron contra este plan al sostener que ese centro comercial era ejemplo de «arquitectura tocha» y que va a afectar al pequeño comercio que queda en la zona y a la estética de Madrid Río. Alegaban que la instalación suscitaba un «clamor en contra» de los vecinos.
El portavoz municipal de IU, Ángel Pérez, aseguró el viernes que los planes para esta parcela ha conseguido el «consenso vecinal más absoluto en contra de lo que se proyecta» y que ,»tras mucho presumir de río, de espacios sublimes, de salones de pino e inigualables puentes», en Madrid Río, aparece un edificio de fachadas ciegas que es «fiel exponente de arquitectura tocha de original falta de estética».
«El proyecto es feo, feo, feo como una campaña electoral», espetó entonces Pérez para añadir que el proyecto tiene unos «altos niveles de perversidad» al afectar al pequeño comercio de la zona.
Sobre el aparcamiento de 1.500 plazas y los accesos directos a Calle 30, el portavoz de IU entiende que ello conllevará «riesgos» para la seguridad y afectará a la fluidez del tráfico. «Si el Gobierno municipal quiere que los vecinos les recuerden, desde luego lo han conseguido», zanjó Pérez.
A su vez, el concejal del PSOE Marcos Sanz detalló que se presentaron 297 alegaciones y un total de 2.107 escritos que reflejan el «clamor en contra» sobre este proyecto y pidió la retirada del plan. «La ciudad les está gritando: no hagan ustedes este despropósito», sostuvo el viernes en la comisión.
Por parte del Ayuntamiento intervino el director general de Control de la Edificación, Norberto Rodríguez, quien aseguró que el expediente llevaba unas imágenes ilustrativas de lo que podría ser el edificio «que no son vinculantes».
Recordó que el plan ya conllevaba un uso comercial y que la oposición en su día no presentó alegaciones al Plan General de Ordenación Urbana de 1997. En cuanto a las plazas de aparcamiento, aseguró que cuenta con los informes favorables de movilidad y que el promotor del proyecto pidió 1.700 plazas y se les ha autorizado 1.500 plazas.