El Gobierno Central ha informado su intención de reabrir el Palacio de Congresos del Paseo de la Castellana mediante una cesión a una entidad privada por plazo de 40 años que contemplaría la reforma de este espacio, con un coste de 72 millones de euros y unas obras que se extenderían durante tres años.
El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, que encabeza la socialista Reyes Maroto, ha publicado este jueves un estudio de viabilidad, adelantado por El País, que apuesta por la cesión para reabrir el Palacio de Congresos, cerrado desde diciembre de 2012 por no contar con las condiciones mínimas de seguridad.
El futuro concesionario deberá hacerse cargo de las obras para renovar el complejo de los años 70, que cuenta con tres edificios de cerca de 40.000 metros cuadrados que podrán ampliarse y donde 6.000 metros cuadrados quedaron inutilizados a causa de un incendio en 1995.
El nuevo Palacio de Congresos de Madrid deberá ser eficiente, mantendrá el mural de Joan Miró, contará con nuevos accesos, ampliará sus instalaciones y albergará en su sede las oficinas de la Organización Mundial del Turismo.
Entre sus instalaciones destacarán un auditorio con espacio para 1.200 personas, patio interior y exterior disponible para eventos al aire libre, salas de banquetes, de conferencias y de trabajo, aparcamiento o, en la propuesta gastronómica, un restaurante de diseño, un bar de comidas exprés, y otro «con terraza, música relajante, tapas y cócteles».
Su puesta en marcha se retrasará al menos otros cuatro años, según los plazos que figuran en el texto, al que se pueden presentar alegaciones durante un mes: 12 meses para la redacción de los proyectos y la gestión de la licencia y tres años (36 meses) de obras. A este calendario es necesario sumar otros 9 meses de licitación.
En este estudio de viabilidad se cifra el coste de los trabajos en 72 millones de euros, se estima también un «clash flow operativo», una caja, de 470 millones de euros en este periodo, que se reducen a los 387 millones si se aplica un canon anual de 1,25 millones. Sin embargo, el estudio alude a la posibilidad de subvencionar las obras o de fijar un canon variable o no imponerlo.
El Gobierno de España subraya que el Palacio de Congresos sería el único en la capital con una ubicación céntrica, junto al estadio Santiago Bernabéu y calcula que permitiría generan 150 puestos de trabajo directos y otros 250 indirectos.
Una vez que finalice la concesión de 40 años, el Palacio de Congresos «revertirá a la Administración en su totalidad, sin derecho a indemnización alguna».
Desde el cierre del Palacio de Congreso, en diciembre de 2012, los alcaldes de Madrid, tanto Manuela Carmena como José Luis Martínez-Almeida han pedido su reapertura y en 2018 se llegó a anunciar que Ifema pasaría a gestionarlo, un plan que no se llevó a cabo.
La última en reclamar su recuperación ha sido la consejera madrileña de Cultura Marta Rivera de la Cruz, que en una entrevista con la Agencia Efe subrayó que Madrid no puede permitirse «el lujo» de «no aprovechar un espacio como ése porque hay un tipo de turismo de congresos que demanda esos lugares en el centro de la ciudad» y «se están escapando oportunidades de negocio».