La actividad física cada vez se trata de un hecho al que le concedemos más relevancia. La realización del deporte después del parto es algo delicado con lo que debemos de tener un especial cuidado.
Lo primero que debemos de tener en cuenta es que nuestro cuerpo, el de las mujeres, tras haber dado a luz a un niño necesita un tiempo de adaptación por lo que está prohibido el deporte después del parto. La cantidad de días que debemos de dejar dependerá primero del tipo de parto que hayamos tenido y segundo de cómo reacciones nuestro cuerpo. En el caso de las madres que han dado a luz de manera natural tienen que estar sin practicas deporte 40 días. Esta cifra sube a 55 si nos han tenido que practicar una cesárea. Si durante este tiempo nos vemos en la necesidad de hacer algún esfuerzo físico lo máximo que podremos realizar son pequeños paseos.
Una vez que podemos hacer deporte después del parto se recomendable que vayamos aumentando la intensidad de manera gradual para no forzar al cuerpo y observar si está aceptando bien los cambios. Si observamos sangrado, por poco que sea, o dolores en la zona del útero debemos de parar y esperar un tiempo más para poder practicar deporte.
La primera zona de nuestro cuerpo en la que nos tenemos que centrar en la realización del deporte es en el suelo pélvico que tras el embarazo se ha debilitado. Una manera de fortalecerlo es con los ejercicios de Keggel. La única deporte después del parto que está prohibido son los abdominales y aquellos en los que pueda haber golpes como el boxeo.
Para hacer deporte tras el parte debemos de tener en cuenta que necesitaremos llevar una dieta equilibrada con un alto aporte de calcio, hierro y vitaminas. Además, tenemos que hidratarnos más que antes porque tenemos que tener en cuenta que perdemos líquidos al hacer deporte y a través del amamantamiento.
Es posible que al hacer deporte la leche cambie de sabor porque aumenta el ácido láctico. Esto no es malo para el bebe, aunque muchos rechazan el pecho. La solución es muy fácil: sacarse un poco de leche después de hacer ejercicio y dar el pecho al bebe un rato más tarde. El pecho además es una parte del cuerpo con la que hay que tener un especial cuidado porque se encuentra en un momento donde la sensibilidad es muy alta y si nos llevamos un golpe o lo presionamos fuerte podemos tener mastitis. Para cuidar nuestro pecho adecuadamente debemos de comprarnos sujetadores de nuestra tala con un alto grado en sujeción.
Hay que destacar que el deporte después del parto ayuda a la activación del metabolismo y con ello obtenemos más vitalidad lo que nos viene bien para evitar la depresión postparto.