Como ya hemos visto en más de una ocasión, en la Comunidad de Madrid hay una gran cantidad de vestigios de la antigüedad que son testigos de la riqueza de nuestra región desde hace siglos. No es raro por tanto que, en medio de una obra o incluso durante un paseo por el campo, alguien se tope con algún fragmento del pasado.
Puede que encuentres una pieza de cerámica, una antigua moneda, o quizás algo más monumental, como los restos de una antigua construcción. Si esto te sucede, lo primero es no perder la calma, y lo segundo, seguir algunos pasos importantes para asegurarte de que ese pedacito de historia sea tratado de la mejor manera posible. A continuación, te contamos qué hacer si te encuentras con un resto arqueológico en la Comunidad de Madrid.
Descubrimientos por azar
Uno de los escenarios más comunes para encontrar restos arqueológicos es el azar. Esto puede ocurrir, por ejemplo, cuando se realizan obras o excavaciones en zonas donde no se sospechaba la existencia de bienes arqueológicos o paleontológicos. Imagina que estás construyendo tu casa o trabajando en el jardín y de repente te encuentras con un fragmento de cerámica o una estructura antigua. ¿Qué hacer en ese momento?
Primero, es fundamental que no des a conocer el hallazgo públicamente, ni a amigos ni en redes sociales. En lugar de ello, tienes un plazo de 48 horas para comunicar el descubrimiento a la Dirección General de Patrimonio Cultural o al ayuntamiento correspondiente. Estas instituciones se encargarán de evaluar el hallazgo y decidir qué acciones tomar. Este es un paso crucial para proteger el patrimonio y garantizar que los expertos puedan intervenir de manera adecuada y segura.
Hallazgos en obras
Otro contexto habitual en el que se pueden encontrar restos arqueológicos es durante la ejecución de obras. Cuando se realizan movimientos de tierra o trabajos de construcción, es posible que salgan a la luz objetos de valor histórico. En estos casos, la legislación es muy clara: el promotor o la dirección facultativa de la obra tienen la obligación de paralizar inmediatamente los trabajos. Además, deben tomar las medidas necesarias para proteger los restos y evitar su deterioro o alteración.
Al igual que en los descubrimientos por azar, es obligatorio comunicar el hallazgo en un plazo de 48 horas a las autoridades competentes, ya sea la Dirección General de Patrimonio Cultural o el ayuntamiento local. Este tipo de intervenciones rápidas son esenciales para evitar la destrucción accidental de elementos de gran valor histórico y cultural. En muchas ocasiones, estos hallazgos pueden dar lugar a nuevas investigaciones arqueológicas que aportan un conocimiento más profundo sobre nuestro pasado.
Denuncia de posibles vulneraciones del patrimonio
Por otro lado, si sospechas que se está produciendo una vulneración del Patrimonio Arqueológico, Paleontológico o Etnográfico, es fundamental que denuncies la situación lo antes posible. Este tipo de denuncias deben formalizarse por escrito ante el ayuntamiento del municipio donde se hayan producido los hechos o ante la Dirección General de Patrimonio Cultural. También puedes presentar la denuncia en cualquier Registro Oficial de la Comunidad de Madrid.
Es recomendable que adjuntes toda la documentación que pueda ser útil para esclarecer los hechos denunciados, como fotografías o cualquier otra prueba que pueda contribuir a la investigación. Una vez presentada la denuncia, los Servicios Técnicos de la Dirección General procederán a investigar la situación para determinar si existe una infracción. En caso afirmativo, se abrirá un expediente administrativo para sancionar a los responsables.
Además, estos hechos también pueden ser denunciados ante el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) y ante los Agentes Forestales, quienes se encargarán de trasladar la denuncia a las autoridades competentes para su tramitación. La protección del patrimonio es un esfuerzo conjunto entre las administraciones y los ciudadanos, por lo que tu colaboración es fundamental para evitar que nuestro legado cultural se pierda o se deteriore.