Hoy en día, comprar cosas de segunda mano está a la orden del día. Estamos seguros de que la mayoría de que nos leéis tenéis descargados en vuestro Smartphone unas cuantas apps en las que buscar ese CD que os falta para vuestra colección de música de los 80 o para vender la bici que comprasteis durante la pandemia y que aún tiene los pedales envueltos en plástico.
Lo que no es tan habitual es que grandes entidades hagan uso de estas herramientas, aunque siempre hay excepciones. Es el caso de la EMT, que ha adquirido a través de Wallapop un ejemplar del icónico autobús Leyland Titan de dos pisos, uno de los modelos históricos más emblemáticos del transporte público en superficie en Madrid durante las décadas de los 40 y 50, y que incorporará a su museo.
La historia de esta adquisición, que la EMT desgrana en su blog, comenzó en enero de 2023, cuando un empleado de la Empresa Municipal de Transportes contactó con el departamento de Patrimonio Histórico tras descubrir un anuncio en esta web. En ella se ofrecía un autobús de dos pisos ubicado en la localidad de Bellpuig (Lérida). Según las fotos del anuncio, el autobús estaba en un avanzado estado de deterioro y no se proporcionaba información sobre la marca, modelo, procedencia o año de fabricación.
Al ponerse en contacto con el vendedor y no obtener más información debido a la falta de documentación del vehículo, el departamento solicitó más imágenes para intentar identificar el autobús y determinar si había pertenecido a EMT o si al menos era un modelo similar. Tras recibir las fotos y realizar varias investigaciones, los resultados fueron prometedores y se planificó una visita para verificarlo en persona.
Más de mil kilómetros en un día
Así, el 17 de agosto de 2023, el equipo de Patrimonio Histórico viajó a Bellpuig (ida y vuelta en el día, mil kilómetros) para inspeccionar el estado interno y externo del autobús y determinar su origen. Un viaje que no fue en vano ya que al comprobar el número de bastidor y otros detalles, se confirmó que el vehículo pertenecía al lote de 50 Leyland Titan de dos pisos que EMT adquirió en 1957, y en concreto, al que tenía la calca 684. A pesar del considerable deterioro tras 25 años de semi abandono, se observó que era posible realizar una restauración integral, tanto de la mecánica como de la carrocería, para devolverle su esplendor original.
Después de las pertinentes negociaciones y superar numerosas dificultades técnicas, logísticas y administrativas, el pasado 20 de junio el autobús llegó a las instalaciones de la cochera de Fuencarral, donde permanecerá hasta que comiencen los trabajos de restauración.
¿Cómo llegó este Leyland a Lérida?
La pregunta del millón está clara. ¿Cómo llegó un autobús de dos pisos a una finca particular de Cataluña? Pues bien, los vendedores son tres hermanos que heredaron el vehículo de su difunto padre, un apasionado de los vehículos clásicos que había reunido una considerable colección a lo largo de su vida.
Durante muchos años, organizó un rally de coches clásicos en diversas zonas de esa comunidad autónoma, y el autobús Leyland fue adquirido para montar un centro de control móvil que se desplazara a lo largo de las etapas del rally. El piso superior del bus le permitía tener una visión panorámica de las carreras.
Cuando el rally dejó de celebrarse y el autobús perdió su utilidad, fue guardado en una nave llena de maquinaria y vehículos, donde permaneció arrinconado durante 25 años hasta ahora. Encontrar esta pieza única e inédita ha sido un hallazgo de gran relevancia y enorme importancia para recuperar uno de los vehículos más emblemáticos de la historia de EMT.
Imagen portada: El Blog de EMT
