La Comunidad de Madrid enfrentó un total de 72.712 ciberataques durante el año pasado, registrando un incremento del 18,6% en comparación con los 61.280 del año anterior.
Estas cifras reflejan las amenazas detectadas en la Administración, excluyendo aquellas organizaciones públicas con servicios independientes de Madrid Digital, como el Servicio de Emergencias 112, la Asamblea de Madrid, la Cámara de Cuentas, el Metro y el Canal de Isabel II.
Desde la Consejería de Digitalización se han querido resaltar los esfuerzos de la Comunidad para fortalecer la seguridad informática en todo su territorio.
Así, se ha implementado más personal, recursos y la creación de una nueva Agencia de Ciberseguridad como medidas clave en esta estrategia. Asimismo, se ha querido subrayar la importancia de atraer grandes empresas a Madrid para establecer plataformas tecnológicas como el centro mencionado, que presta servicios a organizaciones en más de 26 países de Europa, Oriente Medio y África, ayudándoles a gestionar los riesgos asociados con la automatización, la Inteligencia Artificial y el aprendizaje automático.
Más de veinte millones para combatir las ciberamenazas
En el aspecto presupuestario, el Gobierno regional destinó 23 millones de euros en 2024 para fortalecer las infraestructuras y sistemas de información contra ciberamenazas. Más de la mitad de esta inversión, aproximadamente 12,5 millones de euros, se destinó al sector de la salud, considerado crítico debido a su papel como servicio esencial y la sensibilidad de los datos que maneja.
En lo que se refiere a la Agencia de Ciberseguridad de la Comunidad de Madrid, esta contará con un presupuesto inicial de 1,5 millones de euros y se enfocará en mejorar las capacidades de defensa contra los ataques informáticos, brindar apoyo a las entidades municipales con menos de 20.000 habitantes que carecen de estrategias de ciberseguridad, promover el emprendimiento en el sector empresarial, fomentar la conciencia en materia de ciberseguridad en la sociedad y proporcionar un entorno de confianza para la interacción de los ciudadanos con la tecnología.