Que los precios de la vivienda en Madrid se están poniendo imposibles es algo que no coge por sorpresa a nadie. De hecho, seis distritos de la capital figuran entre los 10 más caros de España para alquilar un apartamento, piso o casa.
Así lo asegura el último inmobiliario elaborado por el portal inmobiliario Fotocasa, en el que además se recoge que Almagro, situado en el corazón del distrito de Chamberí, encabeza esta lista con un coste por metro cuadrado que alcanza los 24,22 euros, más del doble de la media nacional. Le siguen de cerca Goya, Palacio y Castellana, todos en Madrid, con precios que superan los 23 €/m².
Estos precios vienen como consecuencia de un extraorinario aumento de precio de varios de estos barrios en 2023, como el de Palacio, que lo hizo en un 17,5%. Así, y según el portal, es la primera vez que el alquiler mensual de una vivienda tipo (dos dormitorios entre 76 y 90m²) en algunas de las zonas más exclusivas de España supera los 2.000 euros.
Otros barrios madrileños como Recoletos y Sol completan la lista de los más costosos, mientras que en el top 20, también se destacan los barrios de Universidad-Malasaña (22,21 €/m²) y Justicia-Chueca (22,19 €/m²), ambos situados en Madrid capital. A continuación, El Viso (21,84 €/m²) en Madrid, registra un crecimiento interanual del 17,2%, consolidando su posición entre los barrios más exclusivos de la capital.
La gente sigue prefiriendo el centro… y los inversores también
Las razones detrás de estos elevados precios radican en la elevada demanda de viviendas en ubicaciones céntricas y bien comunicadas. Barrios como Almagro, Recoletos y Sol son buscados por su proximidad a centros de negocios, atracciones culturales y opciones de transporte público.
Esta demanda constante impulsa los precios al alza, ya que la oferta de viviendas disponibles puede ser limitada en estas zonas altamente codiciadas. A esto se suma la presencia de empresas y actividades económicas de alto valor agregado en estos barrios, lo que también contribuye a la escalada de precios.
Además, los inversores ven en los barrios exclusivos de Madrid una oportunidad para obtener rendimientos atractivos a través del alquiler, lo que puede llevar a una mayor especulación y aumentar la presión sobre los precios; un fenómeno evidente en áreas como Almagro y Castellana, donde esta demanda contribuye a la escalada de precios.