Una de las pocas cosas positivas (o no) que todos recordamos de la pandemia es la incorporación del teletrabajo a nuestro día a día. Esta opción, que estaba más o menos desarrollada en otras partes del mundo pero no tanto en España, se convirtió en obligatoria y, desde entonces, ya es una alternativa en prácticamente todas las empresas.
Antes de la irrupción del coronavirus, el número de teletrabajadores era de 1,64 millones, pero durante el confinamiento domiciliario en el segundo trimestre de 2020, esta cifra se duplicó, llegando a 3,55 millones. Actualmente, 3,06 millones de personas teletrabajan ocasionalmente, lo que implica una pérdida de 494.500 teletrabajadores desde el pico pandémico, representando un descenso del 25,8%, tal y como ha revelado el último Monitor Adecco de Oportunidades y Satisfacción en el Empleo.
Sin embargo, la tendencia a la baja en el número de teletrabajadores en comparación interanual se ha revertido en el año 2023, evidenciando incrementos trimestre a trimestre. Así, durante el cuarto trimestre, se registró un aumento del 19,4% en comparación con el año anterior. La proporción de teletrabajadores en el total de ocupados, calculada mediante una media móvil de cuatro trimestres, alcanzó el 13,6%, un aumento de 0,9 puntos porcentuales respecto al año anterior, con la Comunidad e Madrid a la cabeza.
Madrid lidera el teletrabajo
El análisis a nivel regional, el teletrabajo en Madrid fue líder con un 22,7%, seguido por Cataluña con un 14,9%. Y a pesar de que esta región representa el 15,8% de todos los ocupados, acoge al 26,3% de los teletrabajadores nacionales, mientras que Cataluña, con el 17,5% de los ocupados, contribuye con el 19,1% de los teletrabajadores. En conjunto, estas dos autonomías concentran el 33,3% de los ocupados pero abarcan el 45,4% de los teletrabajadores en España.
En el cuarto trimestre de 2023, 14 comunidades autónomas experimentaron un aumento interanual en el número de teletrabajadores, destacando el País Vasco con siete trimestres consecutivos de incremento. En contraste, tres regiones, Asturias, Galicia y Canarias, registraron disminuciones. A nivel internacional, a pesar del aumento en 2023, la brecha de teletrabajo entre España y la Unión Europea se amplió, alcanzando un 10,5% en comparación con el 8,5% del año anterior.
En el ámbito del empleo a tiempo parcial, se observa una estancamiento desde 2014, con una proporción que ha disminuido del 15,9% al 13,3% en nueve años. Aunque se han creado 3,13 millones de empleos a tiempo completo en este período, los ocupados a tiempo parcial disminuyeron en 25,600 personas, alcanzando los 2,87 millones. La proporción actual es la más baja desde marzo de 2011 y Madrid no es una excepción, con apenas un 12% de trabajadores en estas circunstancias y por debajo de la media nacional y, por supuesto, europea.
Porque comparando a España con otros países europeos, la proporción de empleo a tiempo parcial se sitúa en el 13,3%, por debajo del promedio de la Unión Europea del 17,8%. Holanda lidera con un 42,8%, seguido por Alemania con un 28,5%, mientras que España ocupa el puesto 13 entre los 20 mayores países de la UE.