La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha enviado a los madrileños su Mensaje de Fin de Año, a los que ha deseado una feliz noche, desde la Universidad de Alcalá de Henares, ciudad que ha celebrado en este 2023 el vigésimo quinto aniversario de su declaración como Patrimonio Mundial.
“Hace 25 años, Alcalá de Henares dejó de ser totalmente de los alcalaínos para pasar a ser, en parte, de todo el mundo. Un orgullo para su maravillosa gente”, ha explicado nada más comenzar el discurso.
La Amnistía: «un grave error»
“El grave error de la amnistía hace imprescindible la fortaleza del Gobierno de la Comunidad de Madrid”, ha señalado. La región se ha convertido en el frente de combate y el epicentro de las manifestaciones y movilizaciones multitudinarias. Cientos de miles de personas salieron a las calles de la capital para pedir igualdad ante la ley y que no se concediese favores a aquellos que intentaron romper la unidad de España.
“El grave error de coaligarse con las minorías separatistas vascas y catalanas: el grave error de elegir políticas comunistas que sólo empobrecen y asfixian, de promover la desigualdad entre españoles y el enfrentamiento, hacen imprescindible la fortaleza del Gobierno de la Comunidad de Madrid”, ha incidido Ayuso.
«Madrid, el motor de España»
Estas situaciones, ha explicado la Jefa de Gobierno, hacen que “nuestro papel como motor de España, puerta de entrada de vanguardias y nuevas políticas, de alianzas y apertura, prosperidad y alegría, sea aún más importante”.
“Nos permite continuar con las políticas que nos han situado a la cabeza de toda España en índices económicos, de turismo, de logros sanitarios, de cultura, de esperanza de vida, de educación, de productos agroalimentarios o de desarrollo de nuevas tecnologías. De ilusión por la novedad, por la vida en libertad y en plenitud, por esforzarnos, prosperar, crear y pensar a lo grande”.
«La desigualdad y la división entre españoles»
De la misma forma, Isabel Díaz Ayuso ha querido poner el foco en la desigualdad y la división entre españoles, que según ha declarado “nos va a crear problemas en Madrid”. La presidenta ha apelado a que “defendamos la Constitución, y que la convivencia sea el mayor y mejor trabajo diario: entre nosotros y con todos. Vengamos de donde vengamos. No debemos consentir que nadie levante muros. Una sociedad enfrentada está condenada al fracaso, la ruina y la frustración”.
“En nuestra región no hay espacio para el resentimiento. Nuestro compromiso es con la concordia y la libertad. No perdamos nunca la confianza de los unos en los otros, ni permitamos que nada quiebre nuestros afectos y nuestras ganas”.