Viajar a China sin salir de Madrid ya será posible gracias al proyecto que tiene pensado el Ayuntamiento de Madrid para el distrito de Usera, donde actualmente residen 10.000 ciudadanos procedentes del gigante asiático. Es por ello que el consistorio ha decidido crear su propio Chinatown madrileño, siguiendo el ejemplo de otras ciudades como Nueva York, Londres y Canadá.
El proyecto, anunciado por el alcalde José Luís Martínez-Almeida antes de las elecciones, se encuentra en la fase final de planificación por parte del Área de Obras y Equipamientos. Una de las innovaciones clave es la creación de un itinerario peatonal que conectará la plaza del Hidrógeno con Madrid Río, abarcando aproximadamente 1,7 kilómetros. A lo largo de este trayecto, se incorporarán elementos culturales y referencias que refuercen la identidad de ‘barrio chino’, junto con mejoras en vegetación y alumbrado. Además, se incluirán una escultura de un oso panda y dos arcos orientales que marcarán la entrada y salida de este reducto chino en Madrid.
El proyecto se llevará a cabo en dos fases con dos proyectos constructivos independientes, cubriendo una superficie total de más de 63.000 m² y requiriendo una inversión de alrededor de 9 millones de euros. La rapidez en la ejecución es esencial, ya que la concesión de fondos europeos está condicionada a que la mitad de la actuación esté completada en 2024, mientras que se espera que la segunda fase concluya en la segunda mitad de 2025.
La intervención, que será la mayor obra de regeneración urbana en la historia del distrito de Usera, tiene como objetivo principal convertir al nuevo Chinatown en una parada obligatoria para los visitantes, descentralizando así el turismo de la capital que suele concentrarse en los distritos centrales.
Desde el punto de vista medioambiental, se promoverá la biodiversidad y la sombra mediante la incorporación de nuevas especies vegetales. En términos de accesibilidad, se garantizará la continuidad peatonal en cruces seguros y cómodos, eliminando barreras arquitectónicas.
Además de las mejoras urbanísticas, se impulsará la promoción de la oferta cultural y de ocio de Usera, con la colaboración activa de la comunidad china en un proyecto aún por desvelar.
Fechas y plazos del Chinatown madrileño
La primera fase del proyecto abarcará desde la plaza del Hidrógeno hasta la plaza de José Luis Hoys frente al Mercado de Usera. Con una superficie de más de 40.600 m², se renovará completamente, aumentando las zonas peatonales en 6.000 m². La reforma incluirá la instalación de más de 100 bancos, fuentes, mesas de ping-pong, un circuito biosaludable para personas mayores, y nuevas áreas de juegos infantiles. La sostenibilidad ambiental se potenciará con la plantación de 200 nuevos árboles, jardines de lluvia y la renovación del sistema de alumbrado público por uno de alta eficiencia energética.
La segunda fase, que sigue los mismos criterios que la primera, está en proceso de redacción del proyecto y abarcará más de 22.500 m² desde el Mercado de Moscardó hasta Madrid Río. Este ambicioso proyecto no solo transformará la imagen de Usera, sino que también contribuirá al desarrollo económico y cultural del distrito, convirtiéndolo en un destino atractivo y diverso para los habitantes y visitantes de Madrid.