El Mundial de fútbol 2030, que se llevará a cabo en España, Portugal y Marruecos, está destinado a ser un evento sin precedentes en la historia del deporte y del marketing. Con su celebración coincidiendo con el centenario de la Copa Mundial de la FIFA, se espera que este torneo tenga un impacto inmenso en las marcas y anunciantes de todo el mundo.
Este mundial se considera una edición especial por el centenario de la competición. El torneo se celebrará 100 años después de la primera Copa Mundial de Fútbol, que se celebró en Uruguay en 1930. En honor a este centenario, la FIFA ha decidido celebrar el torneo en tres continentes diferentes: Sudamérica, Europa y África. Además, el partido inaugural se jugará en el Estadio Centenario de Montevideo, Uruguay, el mismo donde se disputó el primer partido de la historia de la Copa Mundial.
El Mundial de fútbol 2030 será un evento histórico que marcará un hito en la historia del fútbol. Será una oportunidad para celebrar el pasado, presente y futuro de este deporte.
El alcance del Mundial 2030 es verdaderamente global. Con más de 4.000 millones de espectadores esperados en todo el mundo, es difícil imaginar una plataforma de publicidad y marketing de mayores dimensiones y audiencia. Los partidos se transmitirán en todos los rincones del planeta, lo que proporciona a las marcas una oportunidad única para conectarse con una audiencia diversa en términos de nacionalidad, cultura y edad. Esta diversidad de público ofrece a anunciantes y marcas la posibilidad de adaptar sus estrategias publicitarias para llegar a segmentos específicos de la audiencia en diferentes países, aprovechando las particularidades de la audiencia en diferentes países, aprovechando las particularidades culturales y los gustos sociales.
El fútbol como deporte global es un factor clave para marcas y anunciantes
El fútbol es una pasión compartida en todo el mundo, y el Mundial es el epicentro de esta pasión. Las campañas publicitarias relacionadas con el torneo tienen el potencial de establecer conexiones emocionales profundas con los consumidores. Las marcas pueden capitalizar esta pasión y convertirse en parte de las conversaciones cotidianas relacionadas con el fútbol, lo que puede traducirse en un mayor compromiso y lealtad con los clientes.
Durante el último Mundial de fútbol, que tuvo lugar en Qatar en 2022, se presenció un fenómeno notable en el mundo de la publicidad y el patrocinio. De acuerdo con las cifras proporcionadas por la consultora inglesa GlobalData, la inversión publicitaria en este torneo alcanzó la sorprendente cifra de 6.500 millones de dólares. De este monto, aproximadamente un 29% provino de acuerdos de patrocinio. Este volumen de inversión marcó un hito en la historia de la Copa Mundial de Fútbol, superando en un 10% la inversión registrada durante el Mundial de Rusia 2018 y se espera sea superado en la próxima edición de 2030.
El Mundial de fútbol 2030 será un evento lleno de emoción que lo convierte en una plataforma perfecta para que las marcas busquen crear conexiones emocionales duraderas con los consumidores. Una campaña exitosa durante el Mundial puede resonar mucho después de que termine el torneo, dejando una huella positiva en la mente de los espectadores.
El ejemplo de Qatar nos mostró sin duda la envergadura de un evento deportivo que contó con un total de 16 patrocinadores oficiales, distribuidos en cuatro categorías distintas. Entre los socios globales se encontraban marcas reconocidas como Coca-Cola, Adidas, Qatar Airways y Visa. Por otro lado, los socios comerciales incluyeron a Budweiser, Vivo, Hyundai-Kia, Hisense, QatarEnerfy, Ooredoo, Alibaba, Mengniu Dairy, Budweiser Zero, Beats by Dre y PlayStation. El valor total de estos patrocinios fue estimado en 1.200 millones de dólares, resaltando la magnitud de las alianzas establecidas.
Los desafíos para anunciantes y marcas
Dado el prestigio y la visibilidad del torneo, numerosas marcas y anunciantes estarán compitiendo por la atención de la audiencia. Para sobresalir en este entorno altamente competitivo, las marcas deberán desarrollar campañas creativas y efectivas que se destaquen de la multitud. La originalidad y la autenticidad serán esenciales para atraer la atención de los espectadores en medio del ruido publicitario. Además, la inversión en patrocinios y publicidad en el Mundial puede ser prohibitiva para muchas marcas. Antes de comprometerse financieramente con el torneo, las empresas deben evaluar cuidadosamente sus presupuestos y asegurarse de que la inversión sea sostenible y esté alineada con sus objetivos comerciales a corto plazo.
Preparando el terreno para 2030
Aunque nos queda un largo trecho para 2030, las marcas, anunciantes y patrocinadores reconocen la importancia de prepararse con anticipación para maximizar su presencia durante el Mundial de Fútbol. En los años previos al Mundial de Fútbol 2030, es probable que veamos un aumento significativo en las actividades a generar conciencia de marca y llegar a una audiencia global.
Los patrocinios de selecciones nacionales, es una de las estrategias más recurrentes y efectivas que permite a las marcas asociarse directamente con el fútbol y los equipos nacionales, ya sea de su país de origen o de naciones específicas. Este enfoque les brinda visibilidad durante los partidos y eventos relacionados con las selecciones nacionales, conectando emocionalmente con los fanáticos.
La creación de campañas publicitarias centradas en el fútbol se mantendrá como una constante en los años previos al Mundial de 2030. Estas campañas podrán tener como objetivo la promoción de productos o servicios específicos, o simplemente buscarán aumentar el reconocimiento de la marca en el contexto del torneo.
Además, se espera que los influencers del fútbol jueguen un papel aún más destacado para el año 2030, ya que las colaboraciones entre marcas y figuras influyentes en el mundo del fútbol serán una estrategia crucial. Esto permitirá a las marcas aprovechar la amplia audiencia de estos influencers y su capacidad para llegar a un público considerablemente más extenso.