La Comunidad de Madrid ha anunciado una inversión de 5,5 millones de euros destinados a la mejora y mantenimiento integral del sistema de videovigilancia de la red de Metro en los próximos cuatro años. Esta inversión tiene como objetivo fortalecer la seguridad en el transporte público subterráneo de la capital.
Metro de Madrid, que opera una red de 302 estaciones y sirve como principal medio de transporte en la ciudad, cuenta con un total de más de 9.000 cámaras de videovigilancia. De estas, 5.000 están distribuidas estratégicamente en sus estaciones para supervisar las actividades y garantizar la seguridad de los pasajeros.
Además, los propios trenes están equipados con un circuito de vídeo interno que permite a los maquinistas visualizar tanto el interior de los vagones como el andén de la siguiente parada en su ruta.
Un puesto para controlarlo todo
Un componente clave de este sistema de videovigilancia es su centralización en un puesto de mando ubicado en la estación de Alto del Arenal, perteneciente a la Línea 1. Desde esta central, los operadores pueden acceder a imágenes en tiempo real y al material grabado. La eficacia de las instalaciones del Metro se apoya en la cooperación de diferentes telemandos de instalaciones, control y puestos de seguridad locales, lo que garantiza el mantenimiento y supervisión adecuados.
El sistema de videovigilancia del Metro de Madrid se utiliza de manera intensiva por diversos departamentos, lo que impone altos estándares de exigencia y disponibilidad para mantener la seguridad y la eficiencia del servicio.