El mítico club de tenis Sport Center Manolo Santana, ubicado en la urbanización de Las Lomas, en Boadilla del Monte, tendrá, por fin, una segunda oportunidad después de que la cadena de gimnasios británica David Lloyd haya anunciado una inversión de 18,6 millones de euros para su remodelación.
Aún no hay un plazo para el inicio de las obras de remodelación del antiguo terreno del club, aunque fuentes del grupo ya han subrayado que su objetivo es destacar por la calidad tanto de instalaciones como de servicios y pasar a ser la nueva referencia en bienestar y fitness del oeste de Madrid. David Lloyd también cuenta con clubes en Aravaca, La Finca y Serrano, en la capital española.
Un sueño truncado con años de vandalismo
Este club se extiende sobre una parcela de 42.434 metros cuadrados y 22.837 de superficie construida. Las instalaciones en sí, cerradas desde 2019, cuentan con una superficie total construida de 3.851 metros distribuidos en cuatro plantas, en las que se encuentra el gimnasio, las salas para actividades dirigidas, área social y para la organización de eventos, spa, sala de lectura y restaurante.
Además del aparcamiento, el centro cuenta con cinco pistas de pádel cubiertas, cuatro descubiertas, diez pistas de tenis, dos frontones y otra pista más de pádel descubierta.
Ahora, tras la remodelación, el centro pondrá el foco en la familia y los deportes de raqueta, si bien otras áreas como la piscina al aire libre, el edificio principal y un spa premium y un spa con jardín completarán el resto del conjunto.
El Sports Center Manolo Santana se levantó en 1970 como uno de los grandes sueños del mítico tenista, siendo durante décadas uno de los lugares de referencia del ocio deportivo en Madrid. Sin embargo, el club del que era socio el legendario tenista junto a su amigo Francisco Santos comenzó su declive y, a finales de la segunda década del siglo XXI, su situación se hizo insostenible, habiendo quedado obsoleto en comparación con otros clubes similares de la zona.
En 2019 la mayor parte de los socios ya habían abandonado el barco y el propietario tuvo que contratar créditos con una entidad bancaria por valor de 1,2 millones de euros, la cual la había vendido a su vez a un fondo de inversión buitre llamado Alkali Europe III que ejecutó el embargo.
Tres años después, en 2022 David Lloyd se hizo con el conjunto tras ofrecer al juzgado instrucción número dos de Móstoles 4,59 millones de euros, una cantidad muy lejana a los 12 millones en los que se había tasado.
Eso sí, esta «ganga» puede significar el renacer de este icono de Madrid.
Imagen portada: industriadeltenis.com