Para los madrileños que se quedan en la capital en la época estival, una de las mejores vías de escape al sofocante calor que suele haber en estas fechas es un refrescante baño en alguna de las piscinas municipales de la ciudad.
Sin embargo, hay algunos vecinos, como los de Barajas, que tienen que desplazarse más que otros para disfrutar de este divertimento… hasta el verano que viene. Porque el Ayuntamiento de Madrid está construyendo en la calle Mistral las primeras piscinas de verano de este distrito, que hasta ahora carecía de unas instalaciones de este tipo.
Los trabajos cuentan con un presupuesto de 2,8 millones de euros y concluirán en el último trimestre de 2023. Las nuevas instalaciones contarán con una piscina de baño de 630 m2 y otra de chapoteo de 49 m2, así como zonas estanciales de playas, tanto duras como de césped, y un edificio compuesto por vestuarios, baños, guardarropa, taquillas, cuarto de basuras, botiquín y vestuarios de personal. Además, el proyecto contempla todas las dependencias de instalaciones necesarias para el correcto funcionamiento de todos los servicios.
Primeras piscinas de verano tres décadas después
Se trata de la primera vez en tres décadas que el Ayuntamiento de Madrid construye unas piscinas de verano, ya que las últimas fueron las de Palomeras, en Puente de Vallecas, que fueron inauguradas en 1992.
A las nuevas piscinas de Barajas se unirán otras en Tetuán que también serán las primeras del distrito. Estas, ubicadas en el paseo de la Dirección, ya han sido adjudicadas y comenzarán a construirse próximamente con un presupuesto de 3 millones de euros. A esto hay que añadir el esfuerzo llevado a cabo a lo largo del pasado mandato en la reforma de las piscinas de verano ya existentes.
En total, se realizaron obras de reforma en diez piscinas de verano por un importe de 31,8 millones de euros. Además, actualmente se está reformando la del CDM Hortaleza, que suma otros 3,7 millones de inversión y cuyos trabajos han entrado en su recta final.