Era casi un desconocido cuando se presentó en 2019. Y ahora, cuatro años después, se convertirá en alcalde de la ciudad más grande de España con mayoría absoluta.
José Luis Martínez-Almeida ha arrasado en Madrid con un más de un 44% de los votos que le dan 29 concejales con los que situar al Partido Popular en disposición de gobernar sin tener que depender de nadie. Ni de VOX, a quienes no querían ver ni en pintura, ni de un Ciudadanos de la ya ex vicealcaldesa Begoña Villacís que no repetirá cargo porque la formación naranja ha, directamente, desaparecido.
A pesar de que los sondeos dibujaban un escenario más ajustado, al final los madrileños han decidido renovar su confianza en un Almeida que ahora deberá cumplir todas las promesas que ha hecho si quiere seguir siendo ese político simpático y cercano que ha conectado con la ciudadanía.
También tendrá muchas patatas calientes entre manos, especialmente la de la movilidad, con unas exigencias de descarbonización cada vez más draconianas para las grandes ciudades y con las que tendrá que lidiar, sobre todo en el momento de tener que decir a los miles de dueños de coches de combustión que no pueden acceder con sus coches al lugar en el que viven.
Eso sí, mejor hacerlo sin tener que depender de nadie… o desde la oposición. Esa que liderará de nuevo Más Madrid, con un resultado infinitamente peor del que pensaban obtener y dejándose siete concejales por el camino. Rita Maestre tendrá por tanto que tratar de asaltar la alcaldía en 2027 y el PSOE replantarse, por enésima vez, cómo recuperar una alcaldía que no ostentan desde los años ochenta del siglo pasado.
VOX suma un concejal más, llegando a los cinco, aunque está claro que esos cuatro de las últimas elecciones parecían más que los de ahora, teniendo en cuenta que condicionaron el gobierno de Almeida hasta este momento.
Quien tampoco condicionará nada es Unidas Podemos, que al igual que Ciudadanos no tendrán representación, poniendo uno de los últimos clavos en el ataúd de un partido que se desangra y que, quién sabe, quizá no llegue a 2024.