Una de las decisiones más importantes que tomamos a lo largo de nuestra vida es el tipo de formación que queremos recibir para enfrentarnos a la vida laboral. Con el paso de los años y, a pesar de que es una decisión trascendental, podemos cambiar de opinión, e incluso formarnos de diferentes maneras, aunque acertar lo más pronto posible hará que nuestra vida profesional sea más eficiente y nuestro crecimiento laboral más rápido.
Estudiar una carrera universitaria es una opción lícita y aconsejable, pero no siempre es la mejor opción. Por otro lado, estudiar un ciclo de Formación Profesional (FP), puede ser una excelente alternativa para aquellos que desean desarrollar habilidades prácticas y relevantes, precisamente, de cara al mercado laboral. En este artículo, vamos a explorar diez razones por las que estudiar Formación Profesional sería la opción adecuada para introducirnos en el mercado de trabajo.
Habilidades prácticas y requerimientos laborales
En primer lugar es indispensable saber hacia dónde nos dirigimos y cuáles son nuestros gustos e intereses, ya que, algunas profesiones requieren un título universitario, mientras que otras son accesibles con una formación técnica. Las FP están diseñadas para enseñar al alumno habilidades prácticas en un campo específico, algo muy positivo en una sociedad muy especializada. Esto supone que, al completar tus estudios, estarás equipado con habilidades concretas y aplicadas que son valiosas en el mercado laboral actual.
Además, los estudiantes que cursen un ciclo de FP de Grado Superior, deben realizar un trabajo fin de grado, que avala sus conocimientos, y entrar en el mercado laboral mediante la realización de prácticas en empresas. Es también una opción perfecta, porque satisface nuestras aspiraciones, pero además, nos abre camino a la universidad mediante pasarelas, a realizar un máster o a incorporarnos al mercado de trabajo.
Empleabilidad en FP, el mundo de las startups
En este sentido, al aprender habilidades prácticas en un campo específico, las FP mejoran nuestra empleabilidad en ese campo. Al terminar nuestros estudios estaremos listos para trabajar en ese campo y tendremos las habilidades relevantes y demandas por determinado puesto de trabajo.
Esto ocurre de una forma muy marcada en nuestra sociedad tecnológica, ya que los puestos más demandados son, de igual forma, los más actuales. Este es el caso de las especializaciones, por ejemplo, en Big Data o Ciberseguridad, a las que se puede acceder a través de Grados Superiores de Informática, en escuelas como PRO2FP, situada en el municipio de Las Rozas, o cursando una ingeniería. Un dato que no debemos olvidar es que el 70% de los alumnos que cursan una FP encuentran trabajo antes de los 6 meses al finalizar sus estudios.
Tal y como ha explicado José Luis Málaga, Socio de PRO2FP, a Madrid es Noticia, «La Formación Profesional como la entendemos en PRO2 significa aprender haciendo con el desarrollo de habilidades profesionales y de competencias digitales. Desde nuestro punto de vista la conexión con las empresas es fundamental, ya que imprime a la educación un carácter innovador y emprendedor, y los alumnos desde el primer momento sienten que están próximos al mundo laboral”.
“En PRO2, queremos cambiar el modelo, por eso lo denominamos ‘La Otra FP’. Nuestros estudiantes aprenden con profesores conectados con el mundo laboral y con profesionales de empresas que complementan la formación mediante talleres y masterclass. En el Campus enseñamos con metodologías activas y en entornos reales que potencian la empleabilidad, como por ejemplo nuestro coworking de startups. Además de ofrecerte oportunidades de movilidad internacional y de prácticas profesionales en España o Europa”.
Costo y tiempo de estudio
Y sobre este tema, hay que señalar que un ciclo de FP de Grado Superior nos costará dos años de estudio y esfuerzo, mientras que una ingeniería nos puede llevar como mínimo cuatro años. Los cursos de FP suelen ser más económicos y requieren menos tiempo que las carreras universitarias tradicionales.
Esto supone un ahorro de dinero y tiempo, para comenzar a trabajar más rápido, o incluso valorar la opción de estudiar un Master FP, que nos proporciona algo que siempre hemos buscado, una optimización de las salidas profesionales. En esta línea, los últimos estudios indican que la FP tiene alrededor de un 42% de inserción laboral, mientras que la universidad se está quedando atrás con un 35%, tal y como señala un reciente estudio de CaixaBank.
Flexibilidad y opciones temáticas
La formación profesional ofrece una amplia variedad de especializaciones y niveles de estudio. Podemos elegir entre una amplia gama de opciones que se adapten a nuestros intereses y habilidades. Además, podemos elegir entre diferentes niveles de estudio, desde cursos de nivel básico hasta cursos de nivel avanzado. Algunos ejemplos serían Administración y Finanzas, Comercio Internacional, Marketing y Publicidad, Administración de sistemas informáticos en red o Auxiliar de enfermería.
La gama de opciones es en realidad, amplísima, tanto a nivel de especialización, como de la propia formación. Podemos plantearnos realizar una FP Básica, destinada a aquellos que no han optado por formarse en la ESO; FP de Grado medio, para los alumnos que no han querido estudiar bachillerato; o la FP de Grado superior, para aquellos estudiantes que después de sacarse el bachillerato no ven la universidad como la mejor opción. Otra opción sería la FP DUAL, en la que se dedica un mayor número de horas a las prácticas con la idea de la inserción laboral.
En este sentido y, valorando especialmente esta última opción, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, señalaba recientemente que “Madrid tiene la mejor FP Dual y se dispara la demanda entre alumnos y empresas por su casi inserción laboral directa”.
Oportunidades de empleo inmediatas
Tal y como estamos viendo a lo largo de este artículo, las FP están diseñadas para preparar al alumno para una carrera específica, los que significa que te brindan oportunidades de empleo inmediatas. Al completar los estudios, el alumno estará listo para trabajar en el campo elegido. Para tener mayores posibilidades de terminar trabajando, debemos tener también en cuenta, otros factores, como la demanda del mercado laboral, el tipo de formación y su calidad o la experiencia adquirida. Pero, sin duda, es la formación más inmediata para que los jóvenes comiencen a cobrar su nómina.
Prácticas profesionales
La inmensa mayoría de los centros de formación en FP ofrecen prácticas profesionales, lo que permite a los alumnos obtener esa experiencia laboral, que por lógica se nos exige, y establecer contactos en el campo elegido. Esto es, sin duda, muy valioso, a la hora de buscar trabajo después de completar los estudios, e incluso, como ocurre en la citada escuela PRO2FP, verte preparado para ser emprendedor.
Conexiones con la industria
Los estudios de FP suelen estar conectados con la industria en la que están especializadas. Esto significa que los alumnos tendrán acceso a profesionales experimentados y a la tecnología más avanzada en determinados campos. Según el Informe del Observatorio de la Formación Profesional en España, de CaixaBank, los estudios de carácter industrial y STEM se han consolidado en la FP Dual.
Las familias profesionales vinculadas con la industria y actividades STEM ocupan una alta cuota de matriculación dentro de los estudios de FP Dual, situándose sobre el 60% de los estudiantes matriculados y con un crecimiento cercano al 28% en el último año.
Aprendizaje práctico y aplicado
Las FP están centradas en el aprendizaje práctico y aplicado, lo que nos proporciona la oportunidad de trabajar en proyectos y actividades prácticas, que te ayudan a desarrollar habilidades concretas y aplicadas.
Algunas de las escuelas, centradas en nuestro mundo tecnológico, ofrecen rutas académicas orientadas a la inserción laboral con una alta cualificación. Un ejemplo sería comenzar cursando ASIR (Administración de sistemas informáticos en red) y después un Máster FP como ‘Big Data’ o ‘Ciberseguridad’, para así, entrar de lleno en una de las 5 formaciones top en empleabilidad.
Desarrollo personal y trabajo en equipo
Estudiar formación profesional puede ayudar a desarrollar habilidades sociales, como la comunicación y el trabajo en equipo. Además, al aprender habilidades prácticas y aplicadas, también se puede mejorar nuestra capacidad para resolver problemas y tomar decisiones en la vida diaria.
Avanzar en nuestra carrera profesional
En función de nuestra ambición, y a través de los Máster FP, también tenemos la opción más sorprendente, que es que la Formación Profesional está catalogada de manera oficial como estudios superiores, por lo que nos da acceso a los MFP, es decir, programas de posgrado diseñados para proporcionar una formación avanzada y especializada en un área profesional determinada.
Como conclusión, hemos de decir que la Formación Profesional es un sistema educativo que proporciona una formación técnica y profesional, que se enfoca en la adquisición de habilidades prácticas y técnicas, para el desempeño de una profesión en concreto. La FP puede ser una opción óptima para aquellos alumnos y alumnas que quieran especializarse en un área concreta y tengan un interés mayor por el mundo laboral.