La dirección nacional de Ciudadanos proclamaba recientemente la candidatura de Araceli Gómez a la presidencia de la Comunidad de Madrid. Con más de veinte años de experiencia en política local en el municipio de Tres Cantos, ahora afronta el reto de que la formación naranja vuelva a tener representación en la Asamblea de Madrid.

Ha sido concejala del gobierno del Partido Popular en el citado municipio entre 2000 y 2003, para, posteriormente, crear la marca independiente Alternativa Popular de Tres Cantos. Como portavoz y líder de APTC continuó presente desde la oposición en la Corporación Municipal durante las siguientes legislaturas.

Fue en el año 2015 cuando se anunciaba la constitución oficial de Ciudadanos en Tres Cantos y, Gómez, se convertía primero en coordinadora y más tarde en candidata a la alcaldía. Ya en 2019, Ciudadanos incorporó a Araceli Gómez en el puesto 12 de la lista de la formación en el Congreso de los Diputados. Fue diputada en la Asamblea de Madrid durante la anterior legislatura y, ahora, ha hablado con MADRID ES NOTICIA, en la sede del partido en la calle Alcalá, sobre las próximas elecciones municipales en la región.

En las primarias de C´s no hubo suficientes avales, pero usted obtuvo más que Villacís. ¿Cómo las ha vivido?

La verdad es que en todo lo que es organización interna, ya hemos pasado esa pantalla, pero sí que es cierto que cuando las cosas están tan claras como en el caso de Begoña, mucha gente no se molesta en entrar en una aplicación. Lo veo con la mayor normalidad. En el caso de la comunidad autónoma, como era un liderazgo más novedoso y no había tanta solidez, ha habido más participación y estamos muy contentos de que la gente lo haya hecho de esta forma.

Tiene más de veinte años de experiencia en política. ¿Cómo afronta este proyecto como candidata? Parece un reto complicado.

Pues con toda la ilusión del mundo. En lo que creemos es en el servicio público y hay que ser útiles y, sobre todo, ver que hay otra forma de hacer política. No nos podemos rendir, porque el sistema tiene muchos mecanismos para desmotivar, para que la gente salga y haga otra cosa, o se canse, o no se vea reflejado en la política. En estos últimos tiempos también hay más espectáculo que política pública y acciones en pos del interés de los ciudadanos. Al final va despejándose el campo de gente que realmente tiene talento y tiene ganas de servir públicamente a los ciudadanos y nosotros no podemos permitir eso. Así que, no nos vamos a rendir tan fácilmente.

“En la Comunidad de Madrid tenemos que recuperar dos pilares básicos: la sanidad y la educación”

Edmundo Bal no logró entrar en la Asamblea. ¿Qué ha cambiado su candidatura para lograrlo?

Ha cambiado muchísimo el contexto. Salíamos de una pandemia, entramos en las dinámicas de los partidos de siempre, que saben mover los hilos para que al final el relato sean ellos. Tienen a los medios de su parte y cuentan su historia, y la realidad no tiene nada que ver. Nosotros nos presentamos ahora y vamos a dejar muy claro que presentamos otro tipo de hacer política y que creemos que hay otro paradigma. La sociedad va hacia un lugar que los partidos de siempre no consiguen entender.

Esto se ve claramente en la gestión los Fondos Europeos. Es muchísimo dinero conseguido con el esfuerzo de todos, porque no deja de ser una deuda compartida en Europa, que nosotros tenemos que aprovechar. Si en la Comunidad de Madrid hubiesen tenido en cuenta a las entidades financieras mucho antes de tener los fondos aquí, podríamos haber sacado muchísimos más proyectos. Sobre todo para placas solares en comunidades de propietarios, y para otros tipos de energía, porque este es el momento de hacerlo.

No se están gestionando bien

No. Hemos tenido dos compañeras que están haciendo un fantástico trabajo en Europa. Además, hoy hemos tenido aquí a los Liberales Europeos apoyándonos en Madrid y vamos a seguir trabajando con ellos y de su mano podemos comprobarlo. No podemos seguir pensando en que los Fondos Europeos se gestionen como hasta ahora, con absoluta opacidad. Como además la responsabilidad es compartida entre diferentes administraciones y diferentes partidos, nadie quiere tocar ese tema.

La rendición de cuentas y la transparencia para nosotros son básicas y en este caso se está haciendo un esfuerzo de muchos miles de millones, para que al final cambiemos algo y transformemos la sociedad. Estamos pagando cosas que los ayuntamientos y las comunidades autónomas hacen desde hace años. El dinero no está destinado a eso y, luego, habrá que dar cuenta a los ciudadanos de su utilidad.

¿Cuál es su previsión en cuanto a los resultados de las elecciones?

Nosotros, no sólo queremos entrar en la Asamblea, que parece un resultado en el que todo el mundo piensa ser el mínimo. Lo que queremos es ser decisivos para llevar a cabo este tipo de políticas. Creemos que hay que transformar la sociedad. La Comunidad de Madrid tiene dos pilares fundamentales para la igualdad de oportunidades, que para Ciudadanos son básicos: tanto la sanidad como la educación.

La tecnología y el mundo que viene están creando una incertidumbre a la que tenemos que dar salida. En Ciudadanos sabemos cómo hacerlo y hacen falta otras personas que entiendan el momento. Tanto en conectar la educación con lo que requiere, no sólo el mercado, sino el mundo al que nos enfrentamos; y la sanidad, con una reorganización que tiene que estar dirigida a la prevención y a la atención primaria. Son cosas que quienes han estado gobernando durante años en este país, no han hecho. Nosotros lo hemos intentado a través de la Comisión de Reconstrucción de la Asamblea y yo creo que han tenido suficiente tiempo como para dejarnos paso a los que realmente queremos cambiarlo.

“Representamos otro tipo de hacer política y creemos en otro paradigma”

¿Cómo se podría resolver el conflicto de la sanidad madrileña?

Hemos estado hablando con muchos de los agentes involucrados, porque, tanto las condiciones en las que desempeñan su trabajo, como la organización de los recursos, confirman la necesidad de un cambio. Un cambio de las herramientas con las que se trabaja. Hay que entender que tenemos que prever. No podemos vivir en un mundo en el que el Big Data se utiliza para vender y comprar y no se utiliza para organizar una administración, cuando los recursos son totalmente previsibles. Y también los escenarios.

Si nosotros tenemos una determinada cantidad de niños y de necesidades, por ejemplo de pediatras, lo que no se puede hacer es seguir insistiendo en otro tipo de especialidades. Se puede prever ese cambio a través de cursos de especialización, de competencias y de un montón de recursos que la propia Administración tenía que haber previsto. No podemos seguir teniendo las mismas excusas que teníamos hace 20 años. Decía el otro día el Presidente del Colegio de Médicos que la Atención Primaria lleva 20 años sin renovarse.

¿Cuáles serían las propuestas más relevantes del programa de C´s para la región?

Principalmente, la igualdad de oportunidades. No hacer un montón de cosas que hacemos desde 1985, que es la fecha de la Ley de Bases de Régimen Local o tener un estatuto que lleva 40 años en la Comunidad de Madrid y que no se ha evaluado. Ahora tenemos que hacer una política de transparencia y que la gente sepa, con el esfuerzo que hace para pagar impuestos, donde va el dinero.

Tecnologías como Blockchain o la Inteligencia Artificial nos habilitan para que esa trazabilidad y ese seguimiento sea parte de una revolución inteligente. Me llama muchísimo la atención que esta, se haga simplemente en la venta. Se utilizan todas estas tecnologías para vendernos cosas, sin embargo, cuando tienen que decirnos hacia dónde van nuestros impuestos, no se utilizan. Tenemos casos de corrupción, pero nosotros mismos somos los culpables. Porque si tenemos tecnologías a nuestra disposición que no utilizamos, para que esa trazabilidad la pueda ver cualquier ciudadano, tenemos que exigir una responsabilidad. Para nosotros, la transparencia y la economía son fundamentales… Tenemos que empezar a conectar las universidades y la educación, no sólo con lo requiere el mercado, sino con el mundo que está por venir.

¿Qué opinión tiene de la actual política fiscal en la región? ¿Se podría mejorar?

Lo que no hacemos en Ciudadanos es demagogia. El Partido Popular, que ha hecho la mayor subida de impuestos en este país, desde Isabel la Católica, según decía algún economista, lo que no puede hacer es vendernos que baja impuestos. La Comunidad de Madrid no puede vendernos que baja impuestos cuando baja los que tienen que ver con las máquinas tragaperras, con la recogida de residuos y cosas que no afectan a la gente de a pie. Y, sin embargo, cuando se acercan las elecciones sí que van a ser unos puntos en el IRPF de las familias…

Estamos cansados de las estrategias de los partidos de siempre. De que haya un plazo de cuatro años de legislatura y, en el último año, sin unos presupuestos aprobados, nos prometan todo lo que no han hecho en los tres años anteriores. Es el momento de exigir que la responsabilidad y que la utilidad sea algo básico. Porque si no, vamos a correr un riesgo que desde Ciudadanos no queremos asumir. Y es que los políticos seamos inútiles y prescindibles. A esa gente luego le exigimos que incremente la natalidad, que además compre casas…es inviable. Ya, con datos, ese discurso no se sostiene.

“Los Fondos Europeos se están gestionando con absoluta opacidad”

Desde C´s se piden mejoras en el transporte en la Sierra de Guadarrama. ¿Qué propuestas contempla a nivel regional?

Nosotros hemos estado durante años pidiendo tanto el carril-bici, que conecte toda la sierra, y el tren. El cierre de la M-50, el tren a Soto del Real y el carril-bici son clásicos populares. Sólo tiene que empezar el año electoral para que salgan a la palestra, a los presupuestos… Dejen de tomarnos el pelo a los ciudadanos. Dejen de decirnos eso dos meses antes de las elecciones y cuando acaban las elecciones, se ha perdido el proyecto, el dinero no está…

Una cosa que a nosotros también nos preocupa es la ejecución de los presupuestos. Todos estamos muy pendientes de cómo se pintan las cosas en un papel que lo aguanta todo. Aguanta que subamos Educación, que subamos Sanidad… Pero luego, lo importante es cómo se ejecutan esos presupuestos. Y a esa rendición de cuentas que se le debe al ciudadano se le da muy poca visibilidad.

Recuerdo épocas en la Comunidad de Madrid que se cerraba el presupuesto con una orden del consejero, en septiembre. Desde septiembre a diciembre no se gasta nada. Se hacen modificaciones de crédito para que cuadren las cuentas. Hay mucha gente que necesita centros de salud, centros educativos, que necesita que la igualdad de oportunidades y, sobre todo, que el desarrollo de su municipio se pueda llevar a cabo.

Ha citado la serie Borgen como una inspiración y que el eje izquierda-derecha está trasnochado. ¿Hay que renovar la política madrileña y las relaciones entre partidos?

Mi abuela era una fan de Ortega y siempre aludía a una frase: “Ser de derecha o de izquierda es una manera de seguir siendo imbécil”. Esa frase, que ha tenido ya mucho bagaje y muchos años es una realidad, porque lo que hacen es ponernos en diferentes esquinas del ring, cuando todos somos ciudadanos. Yo no discuto con mis amigos, con mi familia, con la gente de otros partidos y trato de ponerles en una esquina. Trato de entender cuál es el prisma para enriquecer mi visión. No quiero un enemigo y, menos entre mis compatriotas, mis compañeros…

Estamos ante un momento decisivo y el cambio de paradigma necesita que todos pensemos en cómo mejorarlo. Si mi visión deja a alguien fuera, la complemento con la tuya y, lógicamente saldrá algo mucho más interesante. No estamos en el momento de perder talento. Estamos en un momento en el que Europa lo ha hecho muy bien en el planteamiento, ya que es una etapa de transición. Vamos a transformar la sociedad, vamos a hacer una transición en la que no dejemos a nadie atrás, así que tiene que ser una en la que estemos todos unidos.

Las alianzas, que es lo que vemos en series tan buenas como Borgen es algo que aquí debería ser una normalidad. Hace algunos meses leía un estudio que me decepcionaba mucho, que decía que los políticos estresamos a las personas que tenemos que administrar y que tenemos que ayudar. Para mí eso es inconcebible.

Ha hablado de época de transición. ¿Hacia dónde nos dirigimos?

Yo soy una fanática de la multidisciplinariedad. Hemos estado mucho tiempo siendo demasiado específicos y, cuando somos tan específicos y tenemos poca amplitud de miras, hacemos surco. Cada uno en su profesión va haciendo surco y eso, lo que impide, es que veas qué está haciendo el otro, en el otro surco. Por lo tanto, sí que creo que nosotros aunamos ese talento y tratamos de construir la sociedad que queremos. De la pandemia todos teníamos claro cómo queríamos salir y, en vez de salir todos juntos, estamos saliendo en el otro extremo.

La pandemia ha producido un impacto enorme en algo básico que es la salud mental, pero la salud mental no implica unos recursos cuando ya no la tenemos. El otro día, en un mercado, una señora me dijo que tomaba pastillas por las noticias de los políticos. Yo me emociono, me parece una cosa insólita. Es terrible que haya personas jóvenes pensando, “bueno, a mi me da igual. Yo ya no voy a cobrar la pensión”. Esa no es la historia.

Necesitamos otro sistema, otro contrato social, con otras herramientas. Vivimos más años, vamos a tener que trabajar más años. ¿Quién tiene que trabajar más años? Y, si trabajamos más años, a lo mejor es interesante que hablemos de una semana de cuatro días o de trabajos híbridos. A lo mejor es interesante que hablemos de eso en profesiones en las que nadie se lo plantea. Estamos aquí para innovar, si lo que hacemos es pensar en el sistema de hoy con las profesiones de hace muchos años… Cada vez hay más profesiones para las que nadie estaba preparado. Me voy a dejar la piel para que los ciudadanos vivan su futuro de la mejor manera posible.

“Si seguimos coartando libertades nos convertiremos en un estado autoritario”

En caso necesario, y para buscar mayorías, ¿apoyaría a la derecha o a la izquierda?

Ese eje está tan quemado que lo único que produce es la ley del mínimo esfuerzo. La izquierda y la derecha es una cosa atávica. Ahora la cuestión está en los que queremos transformar el mundo y los que quieren que el mundo siga siendo así porque están muy cómodos.

Desde Ciudadanos, lo que tenemos que hacer es que quien quiera cambiar el sistema, que por cierto, hay un 60% de la población que quiere otro sistema, entre los que nos incluimos todos los que estamos en Ciudadanos. Estamos en un terreno en el que sólo hay arenas movedizas porque, si algo saben los partidos de siempre, es tratar de quitarnos del tablero. Su dedicación durante estos años ha sido irnos minando.

Lo que no es normal es que tengamos países bálticos que se han impuesto en tecnología en pocos años y nosotros estemos haciendo, en transformación digital, centros vecinales que hacíamos hace 20 años. Mire, no nos tomen el pelo.

Ahora que acaba de pasar el 8M, ¿cuál es su postura ante la igualdad y qué opinión tiene sobre la Dirección General de Igualdad que propone Más Madrid?

Cuando hablamos de herramientas, seguro que nos podemos poner de acuerdo siempre. Pero, ¿cuál es la herramienta que va a funcionar? No sólo soy una defensora de la igualdad, sino que llevo 20 años en asociaciones tratando de hacer ver que siempre discutimos el qué, y en el qué estamos de acuerdo. De lo que a mí no me van a convencer es de que yo tengo más diferencias con otra mujer que similitudes.

Lo que no quiero hacer es abrir brechas entre personas que tenemos criterios y, sobre todo intereses compartidos. Yo estoy configurada para la colaboración, algo extraño hoy en día. Voy a tratar de alcanzar metas pequeñas para ir cambiando cuestiones. Lo que realmente me da miedo es que todo es totalmente reversible, hablando de conceptos como la democracia o la igualdad. Si no hay una minoría intransigente luchando por estas cuestiones, desgraciadamente podemos perder todo lo que hemos avanzado. Lugares como Hungría o Polonia están coartando libertades, cambiando derechos y al final nos convertimos en estados autoritarios.

Lo que es insoportable es que se empiece con cuestiones relacionadas con la mujer. Hemos avanzado con unos derechos y esos derechos son incuestionables. Los partidos de siempre, saben que sacar la moral a pasear en elecciones les da réditos. Simplemente minimizan el esfuerzo para obtener el máximo resultado.

Quiero ayudar y acompañar a los ciudadanos, a adquirir un coche, a que las condiciones de las entidades financieras sean lo más leves posibles, que tengan toda la información que necesiten. Lo que no quiere la gente es que le impongan o que no le informen o que no le tomen por un ciudadano con sentido común, que pueda decidir.

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