La Comunidad de Madrid va a intensificar la protección del patrimonio natural y, como ha anunciado este lunes la presidenta, Isabel Díaz Ayuso, se ha identificado un espacio para reintroducir al lince ibérico en la región. Además, hay un registro de 83 parejas de águila imperial, otra de las especies amenazadas, y desde 2019 se han plantado 400.000 árboles.
Díaz Ayuso ha confirmado que ya hay 83 parejas registradas de esta especie amenazada, que estuvo al borde de la extinción. Es la mejor cifra de los últimos años y casi duplica las contabilizadas hace una década -50-, concentrando el 15% de los ejemplares a nivel mundial. Este hito ha sido posible gracias al trabajo del Centro de Recuperación de Animales Silvestres de la Comunidad de Madrid, donde se atiende a animales heridos para que después puedan ser puestos en libertad. Es uno de los más destacados de Europa y en 2022 hubo casi 6.700 ingresos.
“Este Gobierno está trabajando para proteger y cuidar el patrimonio natural de nuestra región. Y lo estamos haciendo sin estigmatizar e ir contra el consumo y el comercio. Lo estamos haciendo, sobre todo, en positivo”, ha indicado la presidenta, quien se ha acercado hasta el corredor de Arco Verde, a la altura de San Sebastián de los Reyes, donde ha soltado dos ejemplares de águila imperial, una especie autóctona de la Península Ibérica y emblemática en la Comunidad de Madrid.
Programa de reintroducción del lince ibérico
Por otro lado, la presidenta ha anunciado que la Comunidad de Madrid ha empezado a desarrollar un programa de reintroducción del lince ibérico, otra especie emblemática autóctona, y que ya ha identificado dos espacios que cumplen con los criterios necesarios para ello. Se trata, por un lado, de la zona centro que incluye montes del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares y el Pardo y, por otro, la zona suroeste madrileña.
Son dos lugares que permitirían llevar a cabo la realización de una actuación de este tipo, por su tranquilidad, con abundantes poblaciones de conejos para su alimentación si bien necesitadas de incremento de lagormofo en algún punto y con menos interferencias externas para su asentamiento. Las áreas abarcan también las Zonas de Especial Conservación (ZEC) Cuenca del río Manzanares y la de la Cuenca de los ríos Alberche y Cofío. Incluyen montes públicos y de particulares de áreas de Colmenar Viejo, San Agustín de Guadalix, Tres Cantos o Hoyo de Manzanares y otros municipios como Robledo de Chavela, Navalagamella o San Martín de Valdeiglesias, en el caso del suroeste.
Durante este 2023, la Dirección General de Biodiversidad de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura, en colaboración con expertos en la materia, estudiarán detalladamente las características de los dos territorios para evaluar el hábitat, especialmente el vinculado con el comportamiento de la potenciación de las poblaciones de conejo, y valorarlas de manera pormenorizada para garantizar el éxito del proyecto.
El Arco Verde, más de 100 kilómetros en tres años
La jefa del Ejecutivo madrileño ha visitado este lunes un nuevo tramo del gran corredor medioambiental Arco Verde a su paso por San Sebastián de los Reyes, que unirá 25 municipios, y del que se han ejecutado en estos tres años 100 kilómetros de su recorrido, lo que supone la mitad del trazado comprometido proyectado a desarrollar en ocho años. Con una inversión de 5 millones de euros, de los 15 totales para este proyecto, ya se han alcanzado los convenios de colaboración con todos los ayuntamientos. También se han adecuado los espacios naturales de la Dehesa Boyal en su conexión con el núcleo urbano del municipio, conectado los carriles bici existentes al nuevo recorrido y acondicionado el área recreativa Arroyo Viñuelas.
A lo largo de todo el itinerario verde se han plantado ya 100.000 árboles y arbustos de más de 50 especies. Se han añadido nuevos espacios públicos y áreas naturales, e iniciado las conexiones con los tres Parques Regionales (Cuenca Alta del Manzanares, Curso Medio del Río Guadarrama y del Sureste), así como con el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama y otros entornos naturales y pueblos. El proyecto final tendrá una longitud circular final de 200 kilómetros.
También se ha instalado mobiliario de uso público como mesas, bancos y pasarelas en las zonas acondicionadas. En cuanto a la fauna y flora, se han creado 20 nuevas áreas de biodiversidad, 20 reservas de mariposas y polinizadoras, se han colocado 85 cajas nido y nidales para aumentar la presencia de aves, 25 hoteles de insectos para invertebrados que favorecen la polinización y cuatro lagunas para fomentar la presencia de anfibios. Por último, Díaz Ayuso también ha participado en la plantación de una encina, el árbol número 400.000 con los que se han repoblado los espacios verdes madrileños desde 2019.