Todos sabemos que los niños son curiosos por naturaleza. Le gusta mirar, ver y aprender cosas nuevas.

Muchos de vosotros os preguntaréis cuál es la mejor actividad para vuestro hijo. La más beneficiosa, la que le ayudará a crecer de mejor manera. Pues bien, déjanos decirte que no existe el hobby perfecto, sino el ideal que se adapte a tus hijos.

EL HOBBY Y SUS BENEFICIOS

Tener un hobby proporciona decenas de beneficios en el desarrollo personal, profesional, físico y mental de tu hijo. Un hobby ayuda a reducir el estrés, a subir la autoestima y la confianza de los más pequeños. Además, completar una actividad que les guste fomenta la creatividad, ayuda al desarrollo de muchas habilidades y de la confianza.

Además, tener interés por una actividad y realizarla de continuo es beneficioso para su mejor descanso, tener un mayor rendimiento y mejorar la actitud ante los problemas de la vida. Que disfruten haciendo lo que más les gusta, les motivará con las cosas que no les gusta tanto. Eso sí, evita que pasen demasiado tiempo con las nuevas tecnologías: ordenadores, televisión, móviles, etc.

El problema es que muchos de vosotros no sabéis cuál puede ser el mejor hobby y mejor se adapte a vuestros hijos. Tenéis miedo a confundiros. Pues bien, os aconsejamos que seáis igual de curiosos que ellos. Elegir diferentes actividades que no comparten las misma habilidades y criterios y dejarle a vuestro hijo que elija la que más le interese. Al fin y al cabo, es él el que va hacer esa actividad durante el año, por lo tanto quien mejor que él quien elija esta.

Aquí os daremos algunos consejos que os pueden ser útiles.

1. DÉJALOS EXPLORAR NUEVAS ACTIVIDADES

Permítele que explore y busque cosas nuevas. La mejor forma para que encuentre su hobby es dejándole experimentar por sí mismo. Déjale que descubra nuevas experiencias y que él las clasifique de mayor a menor dependiendo de su criterio.

Como padres, dales la libertad absoluta y el tiempo suficiente para que busquen y desarrollen sus gustos personales. Es decir, no les inculques algo porque a ti te guste. Sé un espectador ante sus exploraciones.

2. MOTIVA A TUS HIJOS

Si tu hijo no muestra interés en ninguna actividad, muestra tu interés por tu hijo. Pregúntale por sus actividades favoritas. Hablar sobre las asignaturas del cole puede ayudarte a encontrar algo relacionado con lo que más le guste. Al fin y al cabo, los niños te dirán cuál es su asignatura favorita y el porqué. Así pues, aprovecha a dialogar con tus hijos pequeños.

Hazle participar en distintas actividades extraescolares y pregúntale a diario que tal se lo pasa en ellas. Eso te hará el camino más fácil. Por ejemplo, como padres podéis apuntarlo o realizar a clases de cocina, teatro, ir al fútbol o hacer clases de pintura.

3. APOYALOS EN SU HOBBY

Aunque tu no seas fan de su hobby, es esencial que los animes a este. Pregúntale sí le gusta, sí se lo pasa bien haciendo esa actividad.

Estate con él en momentos que se le dificulte. Apóyale en cada una de las decisiones que él tome. Eso le ayudará a seguir adelante, pues nunca se sabe si será un gran talento para ello.

Como padres, debéis de apoyarlo siempre, participar en sus intereses de forma diaria. Con el mínimo acto de ir a verlos jugar, dibujar o actuar podéis hacer que su autoestima aumente. Un pequeño acto como disfrutar de vuestros hijos puede hacer que él se sienta más seguro de sí mismo para realizar aquello que le gusta.

4. COMPARTE TUS SENSACIONES

Por último, dialoga con él. Muestra interés, habla sobre ello, comparte noticias o actividades relacionadas. Todo esto ayuda a tu hijo a desempeñar mejores habilidades al respecto, a estar más seguro y a involucrarse mucho más en eso que le apasiona.

Anima a tu hijo a que experimente, que elija y se confunda. No tiene porque encontrar su hobby a la primera.