Hay quien todavía recuerda esa época en la que todos los residuos que se generaban en casa iban a parar a la misma bolsa. Por suerte, esta estampa es cada vez menos habitual y, en general, los ciudadanos madrileños están cada vez más concienciados con el cuidado del medioambiente a través de hábitos como el reciclaje.
Así se desprende del estudio «Hábitos de la Población Española ante el reciclaje«, realizado por Instituto Catchment para Ecoembes, donde se refleja que el 88,8% de los encuestados madrileños declara disponer de un espacio en su casa para depositar los envases en el cubo amarillo.
De esta manera, los hogares madrileños cuentan con una media de tres cubos o bolsas (más concretamente 3,2)en los que separar los residuos y darles una segunda vida a través del reciclaje.
El reciclaje, «cosa de jóvenes»
Aunque como decimos, la separación de residuos es un hábito muy extendido en la comunidad en todas las franjas de edad, son los jóvenes con edades comprendidas entre los 25 y 34 años los que más reciclan, concretamente el 97,6%. A continuación, se sitúan los seniors de más de 55 años (91,1%) y los de 35 a 54 años (88,2%). A la cola, aunque con una mayoría recicladora, se encuentran la franja de ciudadanos de entre 16 y 24 años, con un 79,2% de recicladores habituales.
En cuanto al grupo social más concienciado con el reciclaje en la Comunidad de Madrid, los casados son el colectivo más comprometido con la separación de residuos domésticos (90%), seguidos muy de cerca por los solteros (88,9%) y aquellos con pareja estable (87,8%). Por otro lado, teniendo en cuenta la unidad familiar, las formadas por dos miembros son las más comprometidas (93,7% frente al 88,8% de media). Asimismo, los hombres se encuentran unos puntos por encima de las mujeres. En concreto, el 89,8% de los hombres madrileños asegura tener en sus hogares más de un espacio en casa para separar y tirar los residuos, y uno de ellos destinado al contenedor amarillo. Una cifra que en el caso de las mujeres se sitúa en el 87,9%.
Por último, el estudio también subraya que la sociedad cada vez tiene menos dudas a la hora de depositar los residuos en el contenedor adecuado. Así, el 87% de los encuestados madrileños dicen tener claro los del contenedor azul. En el caso del amarillo, los ciudadanos madrileños identifican más claramente con este contenedor las botellas de plástico, las tarrinas, los briks y las latas, mientras que hay otros residuos, como los aerosoles y las bandejas o envoltorios de aluminio, que también deben depositarse en este contenedor pero que todavía generan dudas.