Duro golpe de la Policía Nacional a los Dominican Don’t Play, que ha desarticulado una red de hackers vinculada a la banda latina que utilizaba la financiación mediante delitos informáticos para costear la ‘guerra’ entre grupos rivales, adquirir armas, estupefacientes e incluso hacer llegar dinero a sus miembros en prisión.
La operación se ha saldado con un total d 66 detenidos, de los cuales 19 eran integrantes de varios ‘coros’ de la banda en Madrid. También ha habido redadas en otras localidades de la región como Getafe o Pozuelo.
59 víctimas en España
La Policía Nacional ha informado que la organización criminal logró captar medio millón de euros mediante estafas bancarias de técnicas de ingeniería social en toda España. Hasta el momento se ha detectado un total de 59 víctimas en toda el país y se estima que del dinero defraudado el 30% era derivados hacia la actividad delictiva de Dominican Don’t Play y el resto hacia la red de hackers. Asimismo, la organización disponía de criptomonederos por valor de más de dos millones de euros.
Los agentes han intervenido dos pistolas, tres escopetas, cinco machetes, una katana, munición, dinero en efectivo y diverso material relacionado con los Dominican Don’t Play. La red invertía en monedas virtuales y realizaba desvíos patrimoniales a favor de integrantes de los DDP y hacia «mulas» captadas por la banda, en concreto en los ‘coros’ de Embajadores, Arganzuela, Alcobendas, Ciudad Lineal y Leganés.
Durante la investigación, que comenzó en 2001, los responsables de la misma pudieron comprobar que los integrantes de la banda criminal, no dudaban en intimidar, agredir y proferir amenazas, incluso de muerte, a las «mulas» durante el proceso de captación, a los que prometían la posibilidad de formar parte de la banda o subir en rango dentro de la misma.
Menores involucrados en las actividades de los Dominican Don’t Play
Asimismo, los investigadores han podido acreditar que por parte de los integrantes de los Dominican Don’t Play, se utilizaba a menores para la realización de diversas actividades delictivas bajo la promesa de pertenecer o progresar en la banda. Les daban instrucciones para cometer desde ocupaciones de inmuebles, compra de estupefacientes, atracos, robos con fuerza, “vuelcos” hacia bandas rivales e inclusos asesinatos.
En este sentido, se ha podido conocer que dos integrantes de los DDP presuntamente ordenaron el intento de asesinato de un ex miembro de los trinitarios, grupo con el que tenían una venganza pendiente desde el 2009. El suceso ocurrió el pasado día 5 de junio, cuando dos jóvenes entraron en una sidrería de Madrid y dispararon a un camarero que había pertenecido a los trinitarios.