Una de las características más importantes que han de estar presente en el cuidado de mayores en la residencia de ancianos en Madrid, es la personalización. Es verdad que hay enfermedades y padecimientos comunes en este colectivo, pero también hay grupos de personas que necesitan una atención totalmente personalizada. Después de todo, cada persona necesita cuidados particulares, personalizados y adaptados a sus necesidades.
Para ello, existe la atención centrada en la persona y tareas personalizadas para tratar a cada anciano, sobre todo por parte de los profesionales de la institución.
¿Qué es la atención centrada en la persona?
Es un modelo de atención que prioriza la calidad de vida de las personas un mayor cuidado y trato cercano por parte de profesionales y cuidadores. Tal y como ocurre con los ancianos.
Este modelo tiene el objetivo de reconocer la singularidad de la persona y poner el foco en aquello que la hace dependiente para llevar a cabo remedios activos.
Dentro de esta atención estaría todo lo relacionado con actividades como el menú de la comida adaptada a la salud del anciano o tener cuidados personalizados según el nivel de dependencia.
Este tipo de atención supone un escenario donde no sólo se tiene en cuenta las necesidades y características de la persona, sino también su vida cotidiana donde se incluye sus derechos, preferencias y deseos. En este sentido, se busca que la persona esté mejor atendida de una forma más personalizada.
La atención centrada en la persona en residencias de mayores
En este modelo personalizado, se busca que la persona mayor reciba un trato personalizado según sus intereses, gustos, estado de salud y otros factores que mejoran su vida diaria.
Esto obliga a la institución y empresas del sector a tener que adaptarse para dar el mejor de los servicios a las personas mayores y dependientes.
Ante todo, hay que saber que las residencias de la tercera edad no son un asilo, ni un hospital, sino también valorar el tener una atención personalizada, espacios abiertos y habitaciones individuales.
- Tengan libertad de movimientos. Siempre que tengan un buen nivel físico y mental, podrán entrar y salir de la residencia; así como recibir visitas en todo momento.
- Sistema público de salud. El sistema de salud público e instituciones deberían prestar atención a las necesidades y cuidado de los ancianos de forma personalizada.
- Formación en el cuidado de personas mayores. Es necesario que los profesionales que trabajan en este tipo de instituciones tengan formación sobre la salud física, emocional y mental de las personas mayores para que el cuidado sea efectivo.
- Calidad de vida y dignidad de la persona mayor. Esto está por encima de todo, por lo que se necesita una evaluación y control para mejorar la calidad de estos centros para personas mayores.
¿Qué tareas realizan los profesionales de forma personalizada?
Para asegurar un tratamiento personalizado y profesional, es necesario que las personas que trabajan en residencias sean profesionales como auxiliares de enfermería, enfermeros y otros profesionales cualificados, ya que entre sus tareas están las de:
Realizar higiene y aseo diarios
La higiene y el aseo son importantes para realizar un adecuado seguimiento de la persona dependiente. Gracias a esto, no solo se da una limpieza necesaria, sino también reconocer afecciones de importancia como son rojeces debido a la ropa o las escaras.
Hacer movimientos posturales
Los movimientos posturales son importantes para evitar las UPP o úlceras por presión y esto permite a los auxiliares de enfermería o enfermeros saber qué tipo de lesión padece un paciente. Mediante el movimiento de la postura no solo se detectan problemas, sino también se ayuda a que todas las partes del cuerpo tengan una irrigación correcta.
Las úlceras por presión pueden provocar no sólo el fallecimiento de la persona si no se tratan, sino también una larga agonía y dolores. Esa indeseable situación se ha de evitar a toda costa dando atención especial a las personas que pasan muchas horas en la misma postura en el día.
Controlar las constantes vitales y la medicación
Son acciones obligatorias que hay que llevar a cabo para tratar la salud de los mayores. Cualquier desajuste en cualquiera de estos dos factores puede desencadenar más afecciones o problemas de salud, por lo que se necesita una atención personalizada.
Tenemos que recordar que, en muchos casos, las personas mayores consiguen llegar a edades avanzadas gracias a que toman una determinada medicación, que en ciertos casos es mucha y se ha de administrar en dosis y tiempos concretos.
Servicios de acompañamiento
Es uno de los servicios que se ha demostrado que mejora la calidad de vida de las personas mayores, enfermas o con una movilidad limitada. Los ancianos no verán reducidas sus tareas, e incluso, se les puede acompañar allá donde lo necesiten, ya sea para dar un paseo, a centros culturales, etc., aparte de los cuidados sanitarios.
Estimular la vida social
Que compartan el mayor tiempo posible con amigos y realizar actividades grupales. Los seres humanos somos seres sociales por naturaleza y las emociones con otros estimula la producción de hormonas que mejoran el sistema inmunológico y dan mayor aporte de oxígeno al cerebro.
Estimular la movilidad
La inmovilidad deteriora de manera considerable la calidad de vida de los ancianos. Debemos ayudarlos a evitar el sedentarismo y estimularlos a realizar ejercicios en función de sus necesidades.
En conclusión, dar una atención personalizada y personalizable a las personas mayores en las residencias ayuda a que tengan una mejor calidad de vida y que lleguen a sentir estas instituciones como su propio hogar. Y esto se consigue si se recibe la mejor atención en materia de salud, a nivel social y emocional.