Entrevistamos a Juan Antonio Prieto Albarrán, director de Pymes en la Dirección Territorial Centro de BBVA, sobre pymes, sostenibilidad y digitalización.
¿Qué ha pasado estos últimos años para que la palabra sostenibilidad aparezca tan recurrentemente en las memorias económicas de las principales cotizadas?
La sostenibilidad es, junto con la digitalización, esencial para la recuperación económica, el ahorro de costes y la lucha contra el cambio climático. No se trata de algo pasajero ni de una moda, hoy se ha convertido en una oportunidad para las empresas tanto a nivel de competitividad como de rentabilidad. Las empresas que primero se posicionen en este sentido tendrán, sin duda, una ventaja competitiva sobre el resto. No cabe duda que nos encontramos en un momento único para que las empresas apuesten por modelos de negocios más sostenibles. La llegada de los Fondos Europeos hacen que sea el momento para llevar a cabo esta transformación.
Y si hablamos de pymes, ¿cómo se baja a tierra ese objetivo de financiación sostenible?
Es cierto que existe un desconocimiento profundo por parte de las pymes de cómo ser sostenibles les puede hacer más rentables. En BBVA entendemos que el papel de las entidades financieras va más allá de dar financiación. Debemos trabajar para eliminar incertidumbres, para que la información llegue y para hacer sencillos los procesos para que las empresas, pymes y autónomos puedan optar a la financiación necesaria para acometer sus proyectos. La sensibilización, la formación y el asesoramiento son claves para impulsar este cambio. Como entidad estamos preparados para acompañar a nuestros clientes poniendo a su disposición un asesoramiento de calidad, las distintas alternativas de financiación y la gestión de las ayudas, tanto existentes como las de los fondos europeos a los que pueden optar.
BBVA ha sido el primer banco del mundo en usar analítica de datos para calcular la huella de carbono de las empresas. Una funcionalidad del agregador financiero que permite a las empresas, a través del análisis de datos, conocer la cantidad de gases de efecto invernadero que emiten a la atmósfera con su actividad diaria. Conocer su huella de carbono es un primer paso para implementar acciones que les ayuden a reducir sus gastos en energía, al mismo tiempo que generan un impacto positivo en el planeta.
– ¿Cuántos recursos habéis movilizado para la inversión de esta acción hasta el momento?
Durante el 2021 se han revisado los compromisos del Grupo en materia de sostenibilidad, con retos como la eliminación progresiva de la exposición al carbón y la revisión del objetivo de canalizar financiación sostenible para 2025 hasta los 200.000 millones de euros, lo que supone doblar los 100.000 millones del objetivo inicial anunciado en febrero de 2018.
BBVA desarrolla su ambicioso Compromiso 2025 con tres líneas de actuación:
– Financiación de proyectos que contribuyan a la consecución de estos objetivos de sostenibilidad.
– Gestión Riesgos ambientales y sociales relacionados con la propia actividad del banco, hasta el punto de ser neutros en la emisión de CO2
– Involucrar a todos los grupos de interés para promover de forma colectiva una mayor contribución de la industria financiera al desarrollo sostenible.
¿Cuánto hay de movimiento táctico y cuanto de estrategia corporativa?
Al igual que está pasando con la transformación digital, si no la integras dentro de tu estrategia te quedarás atrás. Hay que verla en clave de oportunidad y también de riesgos en caso de no gestionarlo adecuadamente.
Algo así no sería posible sin el compromiso de la dirección. ¿De qué modo se traslada esa política a toda la cultura empresarial de la organización?
En BBVA la estrategia en sostenibilidad está centrada en incorporar la sostenibilidad en toda nuestra actividad diaria. Esta aproximación es lo que nos hace diferentes. Nuestro trabajo desde hace un tiempo es internalizar la sostenibilidad en los procesos ordinarios del banco: desde cómo diseñamos los productos financieros a cómo los ofrecemos.
Nuevamente hablando de pymes, ¿de qué modo se reconoce el esfuerzo en organizaciones más pequeñas?
Inicialmente es una nueva inversión pero poco a poco supone un ahorro de costes para las empresas. Al fin y al cabo se están implantando mejoras de largo plazo en su ámbito empresarial o de negocio. Por ejemplo, la energía es uno de los principales de costes de producción, así que cualquier medida de aislamiento de espacios o instalación de fuentes de energía renovables produce una reducción considerable del gasto energético y por tanto mejora de la rentabilidad de aquella empresa que apuesta por invertir en proyectos que contribuyan a la consecución de objetivos de mejora de sostenibilidad.
La sostenibilidad se convierte así en una oportunidad para hacer nuestras empresas más competitivas, eficientes y resilientes. Y será clave para determinar las empresas que conformarán el tejido empresarial en los próximos años. Estamos en un momento clave para acometer esta transformación
¿Vuestra experiencia con Faconauto bien podría ser un caso de éxito?
Nuestro compromiso es acompañar a los clientes en la transición hacia una economía baja en carbono y poner a su disposición soluciones financieras para hacer de la sostenibilidad una oportunidad rentable que repercuta positivamente en el planeta.
Bajo esta misma idea, a principios de este año, firmamos un acuerdo de colaboración con Faconauto para dar un impulso a la movilidad sostenible a partir de la creación de soluciones innovadoras con el objetivo de reducir o eliminar las emisiones.
En concreto, estamos trabajando para poner a disposición de los concesionarios soluciones financieras para la financiación de vehículos eléctricos y puntos de recarga por todo el territorio español. Asimismo, estamos ofreciendo servicios para compensar la emisión de gases de efecto invernadero que se emiten a la atmósfera durante el periodo actual de transición y transformación tecnológica del automóvil.
Por otro lado, recientemente, hemos anunciado junto a ellos una campaña especial para financiar a través de las soluciones digitales del banco, vehículos híbridos enchufables y eléctricos a un tipo de interés preferente y sin gastos de apertura. Con esta sinergia, los clientes podrán acogerse al Plan MOVES III impulsado por el Gobierno de España, que destinará 400 millones de euros -ampliables a 800- en ayudas directas para la movilidad sostenible.
¿Cómo asesoraríais a vuestros clientes del segmento pyme en esta tarea de la recuperación con sostenibilidad?
Lo primero que debe realizar una empresa es un análisis de su punto de partida, realizar un cálculo de los potenciales ahorros frente a las inversiones que se deben acometer y diseñar una estrategia de transición ecológica adaptado a las necesidades de su negocio. A partir de aquí, la empresa deberá buscar la financiación necesaria para la ejecución de sus proyectos incluyendo la identificación y gestión de las subvenciones a las que puede optar. Son procesos complejos de ejecutar y en muchas ocasiones las empresas no cuentan con los conocimientos y las herramientas necesarias para llevarlos a cabo. En BBVA estamos trabajando con socios estratégicos para ofrecer a nuestros clientes un asesoramiento de calidad, las distintas alternativas de financiación y la gestión de las ayudas de los fondos europeos a los que pueden optar. Uno de esos acuerdos es el que hemos cerrado con Minsait, compañía de Indra, para desarrollar un servicio que permita identificar y gestionar las subvenciones a las que podrán optar los proyectos de sus clientes en España.
No podemos perder de vista la digitalización ¿también ahí contáis con algún tipo de apoyo?
La crisis sanitaria puso de manifiesto que aquellos que habían hecho sus deberes y habían impulsado su transformación digital contaban con una ventaja competitiva frente al resto. La digitalización es una necesidad para cualquier negocio y también es una oportunidad, ya que permite ampliar mercados, reducir costes y en definitiva, ser mucho más competitivo. Pero además, los avances tecnológicos ayudan a democratizar los procesos de transformación ecológica. Así, la digitalización ha supuesto que el producto sostenible que típicamente contaba con un coste de adquisición elevado y quedaba restringido a grupos reducidos, ahora pase a ser una alternativa más eficiente. La realidad es que es posible encontrar a día de hoy alternativas sostenibles tan atractivas en precio como la alternativa no sostenible.
La importancia de la transformación del tejido empresarial español también se ha puesto de manifiesto con la llegada de los fondos europeos ‘Next Generation EU’ (NGEU). De hecho, el plan de recuperación, transformación y resiliencia ‘España Puede’, con cargo a los fondos europeos, destinará el 70% de las ayudas a proyectos de transformación digital y sostenibilidad (40,3% y 29,6%, respectivamente).
¿Algún apunte o consejo para quienes en este momento miran al futuro con incertidumbre y piensan en emprender un proyecto propio?
Que no miren la sostenibilidad como una decisión cara si no como una decisión inteligente. Apostar por proyectos de eficiencia energética en las empresas es clave para un sólido crecimiento a largo plazo porque les ayuda a ser más rentables, competitivas y resilientes ante futuras crisis. Además, estamos en el momento adecuado para aprovechar la llegada de los fondos europeos Next Generation EU y apostar por esta transformación. Diseñar y definir las medidas e inversiones no suele ser un proceso sencillo pero es necesario. En BBVA trabajamos para facilitarles a nuestros clientes esta transición verde, acompañándolos en el desarrollo de sus proyectos con asesoramiento y financiación, siempre de la mano de los mejores partners.