La Policía Nacional ha puesto en marcha en Móstoles, un dispositivo especial que se prolongará durante los meses de julio y agosto, para prevenir “el posible incremento de hechos delictivos debido al aumento de transeúntes en las calles más concurridas de la localidad en la época estival”.
Bajo el nombre de ‘Operación Verano’, los agentes se desplegarán por la localidad con el objetivo de “incrementar la seguridad ciudadana en las zonas turísticas, evitar el aumento de los niveles de delincuencia y, en caso necesario, dar respuesta policial, rápida y eficaz, a las víctimas de los posibles hechos delictivos”.
«Con estas premisas, se intenta proyectar a los ciudadanos una mayor sensación de seguridad, esencialmente entre los turistas extranjeros y nacionales», han señalado desde la Jefatura Superior de Policía de Madrid, donde avanzan que también se contará con la colaboración de la Policía Municipal de Móstoles.
Desde Jefatura explican que, dado que Móstoles «no es una ciudad especialmente turística», el esfuerzo operativo «se dirigirá a la prevención, ante un posible incremento, de hechos delictivos, como son los robos en domicilios o los hurtos en vía pública».
Incremento de la vigilancia y el control preventivo
Para intentar cumplir estos objetivos se aumentará la vigilancia y control preventivo, incrementando la presencia policial, en vías urbanas y de acceso a la ciudad, así como en las estaciones de transporte público y hoteles.
Además, se reforzarán las medidas de seguridad en espectáculos y acontecimientos y se procurará agilizar y facilitar los trámites en la Oficina de Denuncias y Atención al Ciudadano, acortando los tiempos de espera.
Este nuevo operativo sucede a la llamada ‘Operación Parque’, un dispositivo conjunto con Policía Municipal de Móstoles, que se ha desarrollado entre el 18 de mayo y el 30 de junio con el objetivo de prevenir «la posible aparición y proliferación de delitos e infracciones en los parques de la ciudad».
Con la llegada del buen tiempo y el fin del estado de alarma, se preveía «un aumento de usuarios de estas instalaciones», por lo que gracias a este dispositivo «se incrementó la presencia policial y junto con las identificaciones selectivas de personas y vehículos se consiguió evitar la comisión de infracciones y delitos.