En el segundo aniversario de su investidura como alcalde de Madrid, el popular José Luis Martínez-Almeida ha querido sacar pecho de la «remontada» laboral en la hostelería de Madrid asegurando que la región concentra actualmente «más empleo en el sector que Cataluña y Andalucía».
Así lo ha puesto de manifiesto este lunes Martínez-Almeida en la tercera edición de las jornadas Mezcla organizadas por Hostelería de Madrid, en la que el regidor ha destacado que la ciudad ha visto un renacer del lujo con el desembarco de cadenas hoteleras como Mandarin Oriental Ritz o Four Seasons, acompañadas de apuestas gastronómicas de nivel como las del valenciano Quique Dacosta o el malagueño Dani García.
Ha reivindicado además el espíritu «tabernario» de la capital y ha marcado tres retos para el sector: digitalización, sostenibilidad y convivencia entre terrazas y vecinos.
Martínez-Almeida ha recalcado el apoyo del Ayuntamiento de Madrid, gobernado por PP y Ciudadanos, para que «las medidas coyunturales» (en terrazas) sirvan al sector de «empuje sin afectar a los vecinos».
«Somos tabernarios si eso significa apoyar a un sector que se ha esforzado por abrir», ha añadido el alcalde, quien ha recordado que la hostelería es un sector especialmente importante en una ciudad en la que «el 4,6 por ciento del Producto Interior Bruto» sale de este sector.
Dacosta, que suma cinco estrellas Michelin y va a por más en Deesa, ha defendido que el lujo es ahora una experiencia completa y «no hay que tener miedo en hacerlo valer en términos de precio» porque eso permite «pagar al productor y al empleado como toca». «Hemos sido tan románticos que hemos dejado la rentabilidad de lado, pero hay que cobrar como se debe; hay que hacer valer nuestro sector».
«Si lo que paga el cliente es justo por lo que recibe, nunca te va a decir que no. El lujo es algo exclusivo y puede ser un bocadillo de calamares bien hecho», ha expuesto Julio Miralles, chef ejecutivo de Tatel, que ultima aperturas en Los Ángeles y Oriente.
«Calidad y experiencia» es lo que resume como lujo Luisa Orlando, directora de Allard Experience, para quien la llegada de grandes cadenas hoteleras a Madrid supondrá convertir la ciudad «en un destino no solo de trabajo, sino también de turismo».
En otra capital turística y gastronómica, Barcelona, trabaja Jordi Cruz, del Grupo ABaC, quien ha reflexionado sobre la «hibernación» del sector y su reactivación. En su opinión, la hostelería ha pecado de falta de gestión y exceso de romanticismo, algo que debe cambiar.