En agosto de 2019, durante las obras de remodelación de la Plaza de España, la ciudad fue testigo del descubrimiento de unos hallazgos arqueológicos que permitieron acercarse a las grandes operaciones urbanas que tuvieron lugar en el siglo XVIII.
Este hecho supuso la paralización de las obras y el comienzo de un trabajo de coordinación entre el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid para proceder a la excavación, limpieza e interpretación de los restos encontrados por los arqueólogos.

Casi dos años después, el Ayuntamiento de la capital, con el informe favorable de la Comisión Local de Patrimonio Histórico, ha decidido crear un itinerario arqueológico de la evolución de la ciudad en un lugar emblemático de Madrid, el espacio entre el Palacio Real y el Templo de Debod, tras la aparición de restos de la demolición de tres edificios construidos por Sabatini en el siglo XVIII.
Los descubrimientos de 2019 correspondían a los restos de la planta baja y un sótano del Palacio de los secretarios de Estado, denominado Palacio de Godoy y de los contrafuertes de la calle Bailén, por debajo de los límites de los Jardines de Sabatini.

Posteriormente, a finales de 2020, aparecieron una serie de muros de planta semicircular conformados por arcos de medio punto, que se corresponderían con parte del camino de ronda del Cuartel de San Gil.
Este muro de contención, que apareció en la zona del túnel próximo a la calle Ferraz, fue construido para conformar la plataforma horizontal sobre la que Sabatini construyó el Cuartel de San Gil que fue completamente demolido en el año 1908 y cuyo espacio ocupa actualmente la Plaza de España.

Ahora, con este nuevo espacio público a modo de recorrido cultural, se podrá conocer mejor el valor patrimonial de Madrid. La propuesta integra los contrafuertes de la calle Bailén, la planta baja y sótanos del Palacio de los Secretarios de Estado y los restos del muro del camino de ronda del Cuartel de San Gil.