La Comunidad de Madrid ha exigido a la Delegación del Gobierno que se “corresponsabilice” en el cumplimiento de las medidas sanitarias con un refuerzo de policías nacionales y guardias civiles, que ayuden a los agentes locales a atajar el problema de los botellones y las aglomeraciones una vez terminado el estado de alarma.
El consejero de Justicia, Interior y Víctimas en funciones, Enrique López, ha trasladado esta petición a la delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, durante la reunión del Plan Territorial de Protección Civil de la Comunidad de Madrid (Platercam).
López ha exigido a González aumentar la “coordinación con las Policías Locales, asumiendo la corresponsabilidad para evitar aglomeraciones”, con el objetivo de evitar las imágenes de botellones y fiestas que se han producido en la capital por el fin del estado de alarma.
Buscar la certidumbre política y jurídica
En la reunión, las administraciones han analizado la nueva situación jurídica y social y López ha pedido acometer la reforma de la Ley Orgánica 3/1986, de 14 de abril, de Medidas Especiales en Materia de Salud Pública “para que haya una mayor certidumbre política jurídica por parte de las administraciones y por parte de los ciudadanos”.
«La inmensa mayoría de los ciudadanos se comportan de manera prudente, cumplen las normas, las restricciones y los horarios y por un número limitado de imprudentes e irresponsables no se debe limitar un derecho fundamental», ha dicho López en relación al toque de queda. Por todo ello, ha pedido al Gobierno central que «colabore y se corresponabilice con el cumplimiento de la ley para eliminar los riesgos de la salud pública».
La delegada de Gobierno pide a Ayuso que decrete un toque de queda
Por su parte, la delegada del Gobierno ha pedido al Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso que decrete un toque de queda para vigilar que no se produzcan botellones o aglomeraciones en las calles.
Este fin de semana, tras el final del estado de alarma, la Policía Municipal de Madrid ha interpuesto un total de 670 denuncias por consumo de alcohol en vía pública, 357 sanciones a ciudadanos por no usar mascarilla y ha atendido 273 atenciones por ruidos en domicilios, tres en pisos turísticos. Además, se han realizado 20 denuncias por incumplimiento de horarios de establecimientos y aforo superior al autorizado en locales.
“Ha caído el estado de alarma, pero el virus sigue vivo”
«Hay que lanzar un mensaje claro. Ha caído el estado de alarma, pero el virus sigue vivo entre nosotros», ha añadido la delegada del área, Inmaculada Sanz, al tiempo que ha subrayado que habrá un dispositivo de vigilancia especial en el entorno de la pradera
Tras asistir a la reunión fue preguntada por un posible toque de queda y Sanz ha lamentado que el Gobierno haya «perdido un año» ya que no hay «alternativa ni plan b» al estado de alarma, algo que vienen denunciado en los últimos meses.