La Comunidad de Madrid celebra el 150 aniversario de la primera línea de tranvía de la capital con la exposición ‘Madrid desde el Tranvía’, una muestra virtual que hace un repaso a más de un siglo de historia. A través de ella, los visitantes podrán adentrarse en un viaje temporal hasta aquel 31 de mayo de 1871 en el que se inauguró la línea que circuló desde el barrio de Salamanca hasta el de Pozas.
La muestra la conforman 194 fotografías y 21 documentos conservados en el Archivo Regional de la Comunidad de Madrid y el Archivo Histórico de Protocolos de Madrid. A través del Portal de Archivos de la Comunidad de Madrid, es posible volver la mirada al pasado y recordar cómo, durante sus 100 años de existencia, este medio de transporte se convirtió en un testigo de excepción que acompañó a los madrileños en gran parte de los acontecimientos históricos ocurridos desde el fin del reinado de Isabel II y la I República hasta los últimos años 70.
Con imágenes procedentes de fondos fotográficos como los de Martín Santos Yubero, Cristóbal Portillo, Gerardo Contreras, las colecciones Madrileños’ y Postales de Madrid y el Fondo Julio Gómez de Salazar así como documentos textuales de la Diputación Provincial de Madrid, Familia Huerta, Nicolás Urgoiti y Comisaría General de Ordenación Urbana de Madrid y las escrituras notariales del Archivo Histórico de Protocolos de Madrid, se hace un repaso a los antecedentes, la construcción de nuevas infraestructuras, las líneas que circularon por la ciudad y las nuevas profesiones que surgieron a raíz de la creación de este medio de transporte.
Otro de los temas que aborda esta exposición son los antecedentes y medios de transporte público que se adelantaron al tranvía y las compañías pioneras, nacionales y de otros países, que iniciaron la aventura de invertir en este proyecto, que ya funcionaba con éxito fuera de nuestras fronteras. El Archivo Histórico de Protocolos muestra interesantes documentos, como un dibujo del primer ómnibus (coche de dos plantas tirado por caballos) que circuló por Madrid, inserto en el contrato para el establecimiento de un servicio regular en Madrid realizado por el Ayuntamiento de la Villa el 24 de mayo de 1869.
La vida del Madrid más clásico y la publicidad
La popularidad que obtuvo el tranvía dejó constancia de aspectos de la vida cotidiana de los madrileños de la época. En la exposición se pueden observar fotografías en la que se aprecia la vestimenta de aquellos años, las rutinas diarias en el interior de los vagones, las edades y condición social que tenían los usuarios que viajaban en el interior o las enormes colas de pasajeros que esperaban para acceder.
De igual forma se puede apreciar evolución urbana de la capital y su extensión territorial. Con imágenes de la colección ‘Postales de Madrid’, el visitante conocerá imágenes inéditas donde tranvías y carros de caballos circulan por la Plaza de Cibeles, la calle Alcalá, la Puerta del Sol o la de Toledo, Cuatro Caminos, el Palacio Real, la Plaza de España y la Plaza de Toros de Las Ventas. También otras desde la Ciudad Universitaria con sus primeros edificios; el Viaducto, ya reconstruido tras la guerra; y las obras, en 1954, del Nuevo Estadio Chamartín que, un año después, pasaría a llamarse Estadio Santiago Bernabéu. Fotografías tomadas en 1956 muestran un incipiente poblado de San Blas y otra, del mismo año, de la colección ‘Madrileños’, enseña cómo era la Glorieta de Embajadores con su famosa ‘Casa de Baños’ al fondo. La Plaza Mayor adquiere una especial relevancia en este curioso apartado pues, desde 1877, los tranvías “de sangre” (tirados por caballos) fueron un elemento más de su espacio interior por el que también circularon los primeros tranvías eléctricos a partir de 1903.
La exposición también se fija en la publicidad que adornaba los tranvías. Su omnipresencia en la ciudad hizo que este medio de transporte se convirtiera, desde sus orígenes, en objeto de deseo del sector publicitario que vio un potente medio de llegar a los consumidores, con el reclamo de grandes carteles publicitando todo tipo de productos: desde cremas a bebidas espirituosas, pasando por productos alimenticios o electrodomésticos.
El último de los apartados vuelve la mirada a otros países europeos a través de varias instantáneas del Fondo fotográfico Gerardo Contreras, que cuenta con miles de imágenes de la etapa en la que el fotorreportero constituyó la agencia gráfica Contreras y Vilaseca. Gracias a ellas, se puede observar cómo eran los servicios de tranvía en ciudades como París, Roma, Milán, Berlín, Belgrado, Tiflis o Estambul.