La red de comunicación cuántica de la región ya tiene operativa la primera fase de su despliegue en el marco de las iniciativas europeas para promover tecnologías seguras, incluso frente a ataques de ordenadores cuánticos. Los investigadores del Centro de Simulación Computacional de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) se encargan de su desarrollo.
La Infraestructura de Comunicación Cuántica de Madrid, denominada MadQCI por sus siglas en inglés, en colaboración con Telefónica y el instituto IMDEA Software, es “uno de los bancos de pruebas de estas características más importantes de toda Europa”, según explica la universidad.
La comunicación cuántica tiene “el potencial de proteger la infraestructura digital y los datos sensibles de la UE durante los próximos años” y para ello se están creando infraestructuras de prueba en Alemania, Austria, República Checa, España, Francia, Grecia, Italia, Países Bajos, Polonia, Suiza y Reino Unido.
El proyecto europeo OpenQKD
Se trata del proyecto europeo OpenQKD, a diez años y financiado con fondos comunitarios, que investiga algoritmos cuánticos para aumentar la ciberseguridad en varios campos críticos desde las telecomunicaciones hasta el suministro de electricidad, la atención médica, los servicios públicos y la comunicación gubernamental.
La red se usará también para industrializar las tecnologías desarrolladas. «Las tecnologías cuánticas empiezan a estar lo suficientemente maduras como para que algunas de ellas den el salto al mercado. La distribución cuántica de claves es una de las más avanzadas”, opina el investigador de la UPM, Vicente Martín Ayuso.
Con esta iniciativa, la UE busca liderar el sector fomentando “una fuerte cooperación entre la investigación, la industria y el sector público para crear un ecosistema innovador que abra una nueva perspectiva para una Europa digital segura”.
La futura Infraestructura Europea de Comunicaciones Cuánticas (EuroQCI), impulsada por la Comisión Europea permitirá la transmisión y almacenamiento de datos de manera segura mediante enlaces terrestres y vía satélite.
La red reúne un equipo multidisciplinario de fabricantes europeos de equipos de telecomunicaciones, usuarios finales y proveedores de infraestructura crítica, operadores de red, proveedores de equipos de distribución de calves cuánticas, profesionales de la seguridad digital y científicos de 13 países europeos.