El Área de Medio Ambiente y Movilidad de Madrid ha mejorado la accesibilidad en el mobiliario urbano y en las zonas de juego del Yesero, en Puente de Vallecas; el Real de Arganda, en Villa de Vallecas; y de Juan Carlos Onetti y Juan Benet, ambas en Vicálvaro. La inversión total ha sido de 3,1 millones de euros.
Asimismo, se han adaptado a la normativa vigente los bolardos, bancos, pasamanos, barandillas y vallas. En su momento, ese mobiliario urbano cumplía con la regulación. Pero, en la actualidad, el Real Decreto Legislativo 1/2013, de 29 de noviembre -por el que se aprueba el texto refundido de la ley general de derechos de las personas con discapacidad y de su inclusión social-, exigía una renovación.
El propósito ha sido crear una ciudad más segura y amigable con un mobiliario más accesible. Por ejemplo, los bolardos son mucho más visibles ahora, por volumen y por contraste de color, para que personas con baja visión puedan diferenciarlos y evitar tropezones o caídas. También las zonas de juego permiten la participación, interacción y desarrollo de habilidades para todos mediante la introducción de señalización y comunicación visual, sonora o táctil y la implantación de contrastes cromáticos y de texturas entre los juegos y el entorno. Además, se contempla el espacio suficiente para las personas en sillas de ruedas.
Exactamente, el primer contrato que se autorizó para un mobiliario accesible fue adjudicado por 1,8 millones de euros. Sus trabajos comenzaron en octubre de 2019 y finalizaron en el primer trimestre de 2020. En total, se colocaron 6.870 bolardos de diferentes modelos; 425 bancos de 1.80 metros y 400 de dos metros; 1.500 metros de barandillas y otros 1.000 metros de vallas bajas. Así, hasta enero de 2021, se han instalado 12.796 bolardos. Por otro lado, de los 751 bancos previstos, se han colocado 461 y se contempla la colocación de 5.448 metros de barandillas y 1.988 metros de vallas bajas.