La pandemia de coronavirus ha abaratado el precio del alquiler en Madrid un 7,6% en el mes de diciembre con respecto al año anterior, aunque a pesar de la caída, la capital sigue liderando la clasificación con una renta media de 1.789 euros al mes, según el informe elaborado por Pisos.com.
A nivel nacional, la vivienda en alquiler en España registró el pasado diciembre una superficie media de 107 metros cuadrados y una renta media mensual de 980 euros.
Esta cifra arroja una caída mensual del 0,51%, una trimestral del 0,81% y una semestral del 1,01%. No obstante, según los datos del portal inmobiliario, los precios se incrementaron un 1,45% con respecto al mismo mes de 2019.
Las regiones más caras para vivir
Tras Madrid, las regiones más caras para vivir de alquiler en diciembre fueron Baleares (1.369 euros/mes) y Cataluña (1.272 euros/mes), mientras que las rentas más económicas se registraron en Extremadura (466 euros/mes), Castilla-La Mancha (544 euros/mes) y Galicia (601 euros/mes).
Frente a noviembre, el incremento más llamativo tuvo lugar en Castilla-La Mancha (2,49%), mientras que el mayo ajuste se produjo en Cataluña (-3,18%). Respecto al año pasado, Andalucía (8,71%) fue la que más subió y el mayor descenso de los alquileres se localizó en Canarias (7,9%), impactada por la caída del turismo como consecuencia de la covid-19.
Por provincias
Por provincias, tras Madrid se situaron Barcelona (1.501 euros/mes) y Baleares (1.369 euros/mes), y en el lado opuesto se encontró Teruel, con 401 euros mensuales. Además, analizando capitales de provincia más caras para vivir de alquiler, después de Madrid se situaron Barcelona (1.698 euros/mes) y Donostia-San Sebastián (1.299 euros/mes).
El impacto de la Covid-19 sobre el mercado del alquiler
Según el director de Estudios de Pisos.com, Ferran Font, el mercado del alquiler ha vivido un año convulso ya que la corrección natural de las rentas que ya comenzó en los últimos meses de 2019 ha desembocado en ajustes importantes debido a la crisis sanitaria.
Todo ello ha provocado que las «abultadas» mensualidades que arrojaban las capitales de primera línea se desinflaran de forma más acelerada por la pandemia, una caída que se ha visto agravada por el trasvase del alquiler turístico al alquiler tradicional.
Font ha indicado, además, que la limitación de las rentas del alquiler a nivel nacional en la que trabaja el Ejecutivo podría alterar el equilibrio del mercado, que se ve afectado también por las dificultades financieras que atraviesan muchas familias y que complicarán el pago de las rentas. Asimismo, una parte de la demanda compradora retrasará su decisión por prudencia.