Aún no está claro si será este domingo, o el que viene, pero la reapertura de el Rastro, el mítico madrileño, es inminente.
Así al menos lo ha señalado el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, después de que los vendedores del Rastro hayan aceptado la propuesta que les hizo el Ayuntamiento de Madrid para la reapertura de lugar simbólico de la capital.
El regidor ha dicho que el Ayuntamiento hará todo lo posible para que el Rastro reabra el domingo próximo, el siguiente o, en cualquier caso, «lo antes posible».
Asimismo, ha agradecido a los comerciantes «el esfuerzo» realizado. Según sus palabras, «han pasado meses muy duros, muy complicados«, y ha manifestado que «si conseguimos reabrir el Rastro es una buena noticia para todos los madrileños».
Los comerciantes del Rastro aceptaron este fin de semana una última propuesta que les hizo el jueves el Ayuntamiento, aunque han rechazado de esta -por ser tarea del Ayuntamiento- que debieran ser ellos quienes delimiten las zonas de los puestos y el aforo. Consideran este asunto «innegociable», como ha apuntado la portavoz de los comerciantes del Rastro Maika Torralbo.
«Hemos trabajado de manera incansable -ha dicho el alcalde- para hacerles una propuesta en una cuestión difícil por las propias características del Rastro, por su número de puestos, por estar en una zona con alta densidad de población, y por tanto con las dificultades en cuanto al control del aforo y la garantía de que no se puedan producir riesgos adicionales de contagio».
Almeida ha precisado que será el Ayuntamiento de Madrid «con sus medios» el que controle el aforo, aunque ha advertido que posiblemente no vaya a encargarse de esa tarea la Policía Municipal.
Con respecto a los balizamientos, Almeida ha considerado que «es una cuestión muy menor» y ha agregado que «es una responsabilidad esta que no incumbe solo al Ayuntamiento sino también a los comerciantes».
Por su parte, en un audio y un escrito remitidos a la prensa, Torralbo dice que la última propuesta del Ayuntamiento les «sorprendió» por ser un «retroceso» al pedir que fueran ellos quienes delimitaran los puestos del Rastro con cinta balizadora y se encargasen de señalar los lugares por donde deberán transitar los vecinos y visitantes.
Según Torralbo, se trata de un asunto «ya superado» en un debate anterior en el que el Ayuntamiento se había comprometido a hacerlo.
La portavoz asegura que, ante las posibilidades de rechazar o aceptar del todo la propuesta del Ayuntamiento, un poco más de la mitad de los comerciantes ha optado por una solución intermedia de aceptarla «sin admitir de ninguna manera» que sean los vendedores quienes se encarguen del perímetro y del aforo.
Torralbo ha manifestado la extrañeza del colectivo de comerciantes del Rastro ante la falta de «formalidad y rigor» de la propuesta última del Ayuntamiento con respecto a las anteriores, pues ésta les llegó «sin membrete oficial ni firma alguna».
La propuesta del Ayuntamiento aceptada por los vendedores prevé la reapertura del Rastro por sectores con 500 puestos y un aforo total limitado hasta las 2.700 personas.
También recoge la colocación de los puestos, con un sistema rotatorio de domingos y festivos, como habían solicitado los comerciantes porque el público es diferente en función de si es domingo o festivo.