El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, continúa en su empeño de convertir Madrid en una ciudad más sostenible y se ha marcado como meta eliminar en 2025 «todos los autobuses que no sean eléctricos» y prohibir las calderas de gasóleo en 2027.
Así lo ha anunciado durante un debate virtual sobre ‘Las ciudades inteligentes y los retos de la energía‘, organizado por Fundación Repsol y la Universidad Carlos III de Madrid, con el objetivo de impulsar proyectos de impacto en materia de sostenibilidad en el marco de la transición energética.
Las ciudades más sostenibles serán aquellas que apuesten por la transición energética, la digitalización, la movilidad sostenible y la cooperación público privada, así como la integración de la naturaleza en el medio urbano, han coincidido los alcaldes de Madrid, Vigo, Sevilla, Bilbao y Santander durante el debate.
El regidor madrileño ha señalado la importancia de implementar el modelo de «ciudad 15 minutos» a la hora de potenciar la resiliencia, la movilidad sostenible y lucha contra la crisis climática.
Según Almeida, hoy en día quien «marca la pauta en Europa es la alcaldesa Anne Hidalgo en París», ciudad que ya ha implantado dicho modelo y que el alcalde madrileño considera «similar a Madrid en cuanto a población y peso económico».
Este concepto de ciudad «muy cercana», que supone tener todos los servicios a un radio de 15 minutos desde nuestro domicilio, «aumenta la sostenibilidad y la calidad de vida de los ciudadanos», ha señalado.
Para el alcalde, los pilares fundamentales para la transición ecológica en las urbes son la digitalización, el compromiso con la descarbonización y la Agenda 2030 de las Naciones Unidas.
Almeida ha precisado que algunas medidas que implementará Madrid en esta línea serán la prohibición de las calderas de gasóleo para 2027 y la eliminación en 2025 de todos los autobuses que no sean eléctricos.