El Ayuntamiento de Ciempozuelos ha comenzado a repartir este martes mascarillas transparentes en los comercios, los colegios y los centros sanitarios del municipio para promover su uso y ayudar así a las personas con deficiencias auditivas, así como a las personas con autismo.
Las mascarillas pueden sacar a estas personas “del aislamiento y la incomunicación” derivados de su uso obligatorio, ha explicado el Consistorio. Y añade que el distanciamiento social es otra de las causas que, según el Ayuntamiento, provocan que “el aislamiento se convierta en una dura realidad para ellos”.
La iniciativa de fabricar mascarillas transparentes surgió de las personas afectadas por estos problemas, pero también fue instado por parte de colectivos de médicos y de profesores de Ciempozuelos, que han alertado de la existencia de personas que “necesitan ver la cara de su interlocutor para poder comunicarse y sentirse tranquilos”.
En este sentido, se ha procedido al reparto de más de 4.000 mascarillas entre los vecinos, a domicilio si se trata de personas de riesgo, al tiempo que ha enviado pantallas protectoras en centros residenciales en los que viven más de 2.500 personas. También se ha entregado material para confeccionar mascarillas a los grupos de voluntarias que se han prestado a ello.
Por su parte, la alcaldesa del municipio, Raquel Jimeno, subraya que “Ciempozuelos es una ciudad hospitalaria y debe ser ejemplo y motor en la atención y concienciación en favor de las personas con necesidades especiales”. A lo que añade que “es una obligación y un compromiso que cumplimos con enorme satisfacción”.