Un Dos de Mayo histórico. Para recordar. Triste por los que nos han dejado y alegre por los que han luchado, luchan, y lucharán contra un virus que ha cambiado nuestras vidas.
El coronavirus Covid-19 no llegó a la Comunidad de Madrid sigiloso. Se sabía lo que iba a pasar. Puede que no la magnitud, pero sí que la pandemia había traspasado nuestras puertas. Lo que ha sucedido desde entonces todos lo estamos viviendo en nuestras carnes: perdiendo seres queridos, negocios, proyectos de vida.
Este año a la larga y merecida lista de héroes del Dos de Mayo se unen los sanitarios, policías, militares, bomberos, voluntarios y trabajadores esenciales que han estado en primera línea frente a un enemigo que no conocían. Y que han contado con, en el mejor de los casos, escasas armas.
Pero Madrid siempre se levanta. Siempre da la cara. Siempre resurge. Siempre sale victoriosa. Porque los madrileños sabemos que somos uno y que somos todos. Sabemos que la libertad es la mejor de las razones por las que luchar.