Cada día laborable, los madrileños realizan una media de 2,4 viajes, en los que recorren 17,1 kilómetros y a los que dedican 69 minutos, y cuya suma total asciende a 15,8 millones de desplazamientos diarios, de los que el 39 % se hacen con vehículo privado, el 34 % a pie y el 24 % en transporte público.
Son algunos de los datos que se desprenden de la Encuesta Domiciliaria de Movilidad 2018, la primera que se elabora desde 2004, presentada este miércoles por el Gobierno regional y para cuya realización se llevaron a cabo 85.000 encuestas a personas mayores de tres años entre febrero y mayo de 2018.
En los últimos quince años, indica el sondeo, se ha fracturado la paridad que había entre transporte público y privado, dado que en 2004 los desplazamientos en coche suponían el 34 % y, los que se hacían en medios públicos, el 32 %.
El consejero de Transportes, Movilidad e Infraestructuras, Ángel Garrido, encargado de presentar el estudio, ha recordado el impacto de la crisis en el uso del transporte público, que ha ido creciendo desde 2014 hasta recuperar los niveles propios de 2007, y se ha marcado como objetivo que un tercio de los desplazamientos de la región se hagan de este modo.
Entre las modalidades de transporte público prevalece el Metro, con un 39 % de los desplazamientos, seguido de los autobuses de la EMT (29 %), los autobuses interurbanos (14 %) y el Cercanías (13 %). El 79,4 % de los usuarios usa el abono transporte.
La postal de la movilidad regional viene marcada, en buena medida, por la estructura demográfica y laboral, con una periferia de creciente peso; los distritos en el interior de la M-30 han perdido casi el 4 % de la población y más del 12 % del empleo, en favor de zonas más alejadas.
La distancia al ‘kilómetro cero’ es decisiva sobre el índice de motorización: en la «corona regional», el 88,1 % de los hogares dispone de al menos un vehículo, un porcentaje que se reduce hasta el 37,6 % en la almendra central de la capital.
En este área, destacó Garrido, el 80 % de los viajes son «sostenibles» (en transporte público, bicicleta, patinete o a pie) y sólo un 20 % en coche, situación que se invierte en los municipios más alejados de Madrid, donde el uso del vehículo privado se dispara al 56 %.
De hecho, entre municipios distintos de Madrid más del 80 % de los viajes se hacen en coche, lo que denota, apuntó Garrido, la necesidad de «rediseñar» la red de transporte público para que se adapte a estos movimientos «transversales» que han ido superponiéndose a los «radiales».
Garrido subrayó, asimismo, que desde 2004 los desplazamientos a pie han crecido un 20 % y que los realizados en bicicleta se han multiplicado por cinco, aunque sólo suponen un 0,5 % del total.
También hay diferencias por género: las mujeres caminan más (36 % de los desplazamientos, 31 % en los hombres) y usan más el transporte público (27 % frente a 21 %), mientras que los varones recurren más al coche (44 % de sus viajes, 35 % entre las mujeres).
Bajo un criterio de edad, existe un predominio de los viajes a pie entre los menores de 18 años (47,5 %) y mayores de 65 (53,5 %), y el transporte público sobresale en la franja de 18 a 29 años (50 % de los desplazamientos), generalizándose el uso del coche entre los 30 y 59 años (49 % de los viajes).
En la distribución horaria de los desplazamientos se nota especialmente la edad: los menores de 26 años registran sus picos de movilidad a las 8, 14 y 17 horas, los mayores de 64 años se mueven sobre todo a media mañana y en menor medida por la tarde, y para las demás edades la distribución es más homogénea.
El 43 % de los viajes de los madrileños se incluyen en la «movilidad ocupacional«, o sea, determinada por el trabajo (27 %) o los estudios (16 %), situación que contrasta con la observada en 2004, cuando sumaban el 60 % de los desplazamientos. Los siguientes motivos en importancia son las compras (12 %) y asuntos personales (12 %).
Aunque la encuesta deja claro que Madrid es una región de incesante movimiento, no es así para todo el mundo: un 12 % de los participantes en el sondeo no realizaron ningún viaje el día de la encuesta.