El último informe ‘Situación Madrid’, presentado este miércoles por el economista jefe para España de BBVA Research, Miguel Cardoso, prevé que el PIB de la comunidad crezca un 2,6% en 2019 frente al 3,7% de 2018 y que continúe desacelerándose hasta el 2,2% en 2020. Esta tasa superará la esperada para el conjunto de España en 0,7 puntos porcentuales en 2019 y en 0,6 puntos porcentuales 2020, y permitirá que la región madrileña sea la única comunidad que podría crecer por encima del 2% en 2020.
Diversos factores explican el menor ritmo de crecimiento de la economía madrileña. Así, la demanda interna muestra una mayor desaceleración que la esperada, principalmente, por la ralentización del gasto de los hogares madrileños. Esto se debe al agotamiento de la demanda embalsada durante la crisis y de los efectos de las políticas expansivas, elementos que actuaron de soporte en años anteriores. No obstante, el consumo sigue mostrando un mayor dinamismo que en la mayoría de regiones. De la misma forma, la inversión en maquinaria y equipo podría moderar su avance y la de vivienda seguirá contribuyendo favorablemente a incrementar la actividad, pero con menor dinamismo.
La desaceleración del gasto de los hogares, el freno de las exportaciones de servicios turísticos y el menor impulso de la demanda europea apuntan un menor crecimiento de las comunidades autónomas, en línea con España. La actividad de las comunidades insulares, así como del centro y norte peninsulares, se estaría viendo más afectada. Por el contrario, el turismo nacional ha sostenido el crecimiento de las regiones mediterráneas y de Madrid. Así se recoge en el Observatorio Regional de BBVA Research correspondiente al cuarto trimestre de 2019.
Sin embargo, la comunidad cuenta con algunos factores de soporte. Durante los primeros meses de 2019, la evolución de la demanda externa ha sido favorable. Así, los datos acumulados hasta septiembre muestran un aumento del 6,1% de las exportaciones de bienes (nominales) respecto a un año antes, mientras que el incremento en el mismo periodo del año anterior se situó en el 0,6%. Este avance de las exportaciones se apoyó principalmente en el impulso de las ventas hacia la zona euro y los países asiáticos. Por su parte, el turismo también habría mostrado una mayor fortaleza que el conjunto de España, favorecido por el repunte, del crecimiento del gasto turístico de extranjeros hasta el 6,8% anual, también en el acumulado hasta el mes de septiembre. Este dinamismo del turismo extranjero habría compensado el menor impulso del turismo nacional.
Madrid se sitúa entre las regiones con mayor crecimiento del empleo
De cumplirse el escenario previsto, entre el final de 2018 y el de 2020 el Servicio de Estudios de BBVA prevé la creación de 128.000 nuevos puestos de trabajo en la Comunidad de Madrid. Esto permitiría situar el empleo, al final del bienio, un 1% por encima del nivel máximo precrisis. Sin embargo, la tasa de paro, del 10% promedio en 2020, continuará todavía 3,7 puntos porcentuales por encima del nivel promedio de 2007.
Además, Madrid muestra mayor dificultad que la media española para cubrir determinadas vacantes por la falta de formación. A esto se añade la incidencia del paro juvenil y de larga duración, que aunque se ha reducido, aún se sitúa en niveles altos. Por tanto, BBVA Research señala la necesidad de impulsar medidas que favorezcan la formación y la inserción de los colectivos con más dificultades.
Factores de incertidumbre
Este escenario está condicionado por la existencia de algunos riesgos. En el escenario global, las dudas sobre el brexit siguen representando uno de los riesgos más evidentes. Madrid no estaría entre las comunidades más afectadas por canales directos debido al menor peso en el PIB regional del gasto turístico y de las exportaciones de bienes.
Además, hay que añadir el aumento de las tensiones comerciales entre Estados Unidos, China y la UE, que también condiciona la evolución del sector exportador. Los recientes cambios arancelarios de EE.UU., que afectan principalmente a productos alimentarios,tendrían un efecto relativamente reducido para Madrid, ya que las exportaciones de bienes suponen unos 10 puntos porcentuales menos del PIB regional que la media nacional.
A nivel doméstico, la incertidumbre de política económica se mantiene elevada y podría estar afectando a las decisiones de gasto de familias y empresas, lo que ha contribuido al aumento de la tasa de ahorro de los hogares y al debilitamiento de la inversión por parte de las empresas.
Con todo, la economía española y la madrileña se encuentran mejor preparadas para afrontar un escenario de menor crecimiento.