El Ayuntamiento de Alcobendas va a solicitar al Ministerio de Fomento la creación de un carril bus-VAO reversible en la carretera A-1 hasta su conexión con la M-30, para tratar de «mejorar la movilidad en la zona norte» de Madrid. Así se ha aprobado en el pleno municipal, a través de una moción propuesta por PSOE, PP y Ciudadanos, que ha contado con el apoyo de Vox y la abstención de Podemos.
El texto también insta a hacer un estudio de evaluación sobre los beneficios que tendría en el tráfico de la A-1 la apertura gratuita de los peajes de la R-2 y la M-12, en los tramos que unen el término municipal de Alcobendas con la M-50. Alcobendas va a solicitar también a Fomento la ampliación de la red de Cercanías de Renfe a los municipios de la zona norte “afectados por la congestión de la A-1 y la M-607”, según señala el Consistorio en una nota de prensa.
Por su parte, el Ayuntamiento se ha comprometido a poner en marcha en 2020 un nuevo plan integral de movilidad local, que incluye nuevos aparcamientos disuasorios para evitar la entrada de vehículos al casco urbano y el estudio de peatonalización de calles del distrito Centro.
Además, se impulsarán los autobuses lanzadera y los coches compartidos entre los empleados de los entornos empresariales de la ciudad. En el pleno se ha aprobado instalar en los centros municipales nuevas máquinas expendedoras de comida y bebida «saludable», con opciones específicas para personas con intolerancia alimenticias o alimentación vegetariana.
Además, se ha dado luz verde a habilitar una sala del Ayuntamiento como comedor oficial para los empleados públicos. Al término de la sesión, el concejal, portavoz del PP y alcalde de Alcobendas entre 2007 y 2019, Ignacio García de Vinuesa, ha presentado la renuncia a su acta de concejal tras ser nombrado por la Comunidad de Madrid Comisionado para las Víctimas del Terrorismo.
