El 12 de marzo ha sido el Día Mundial del Glaucoma. Es el causante de nueve de cada doce casos de ceguera, según Acierto.com, un comprador de seguros de salud. Con motivo de esta enfermedad, el Hospital La Milagrosa ha creado una campaña ciudadana de detección precoz que finaliza este jueves 14 de marzo.
El glaucoma es una enfermedad crónica y degenerativa. Si no se detecta y se trata a tiempo, puede llegar a provoca ceguera, así como pérdida de visión irreversible. En nuestro país, esta patología afecta a más del 3% de la población. Eso supone casi 1,5 millones de personas. Además, el problema se agrava, ya que la mitad de los casos no tienen un diagnóstico.
¿POR QUÉ SE PRODUCE?
“El glaucoma se produce porque el paciente presenta una presión intraocular elevada que con el tiempo acaba dañando el nervio óptico”, según explica David Antolín, jefe del servicio de oftalmología del Hospital La Milagrosa y director médico de Central Ocular. No obstante, “esta elevación no produce ningún síntoma que el paciente pueda detectar”, añade. Y es que no se refleja en el aspecto externo del ojo y como la reducción del campo visual es tan sutil el paciente no llega a sospechar que tiene un problema de visión.
Y es que el ojo produce un líquido, llamado humor acuoso, que es responsable de mantener la forma redondeada. Este líquido tiene que reabsorberse en la sangre. Cuando el humor acuoso no se drena a la misma velocidad que se produce, aumenta la presión intraocular. Al mantenerse en el tiempo, esta es la principal causante del glaucoma. Aunque no siempre es así, ya que cada persona tiene una presión diferente y algunos pacientes padecen glaucoma y tienen presiones intraoculares bajas.
¿CÓMO SE TRATA?
Las revisiones periódicas son importantes, pero también hay que cuidarse la vista en general. por ello, lo ideal es mantener los ojos limpios, protegerlos con gafas de sol o de buceo, llevar una dieta equilibrada, reducir la sal en las comidas y conocer los factores de riesgo.
Para su tratamiento, se ponen dos microstents en cada ojo. Esta intervención se realiza de manera ambulatoria. Solo necesita el uso de gotas anestésicas. Con dicha técnica, se puede controlar la tensión ocular y consigue reducir la tensión intraocular en un 34% de media. “Esta técnica también está indicada para pacientes con factores de riesgo como prevención del glaucoma”, según ha apuntado David Antolín.
Hay otros tratamientos también mínimamente invasivos para el glaucoma,c como el láser SLT (Trabeculoplastia Láser Selectiva). Son pequeños disparos selectivos en la malla trabecular, que es el responsable del no drenaje del humor acuoso. Esta técnica está indicada en glaucomas leves y moderados y aquellos con presión intraocular alta.
¿QUIÉN LO PUEDE PADECER?
Los principales factores de riesgo asociados al glaucoma son ser mayor de 40 años, tener antecedentes familiares y estar en tratamiento con corticoides (su uso aumenta la presión intraocular), según la Sociedad Española de Glaucoma. Además, a partir del los 70 años, el porcentaje de personas con glaucoma asciende a un 10%. Otros factores de riesgo también son la diabetes mellitus y la miopía elevada.
Las revisiones oftalmológicas anuales podrían evitar la gran mayoría de los casos de ceguera causados por el glaucoma. Por ello, el Hospital La Milagrosa en Madrid ha dirigido una campaña ciudadana gratuita entre el día 12 y 14 de marzo para detectar precozmente la patología. Se hacen pruebas sencillas y rápidas en una consulta ambulatoria: presión intraocular, fundoscópica del nervio óptico y, si hay sospechas de glaucoma, tomografía de coherencia óptica.