Los vecinos de Alcorcón no pueden más. Contenedores llenos, islas repletas de bolsas de basura, objetos e incluso restos de comida, mal olor por las calles e imposibilidad de pasar por delante son, entre otras, las consecuencias que está viviendo el municipio de Alcorcón desde hace más de un año por la insuficiente limpieza y recogida de basura. Por fin su malestar y su presión tienen repercusión.
La pasada semana se hacía público que ESMASA, la Empresa de Servicios Municipales de Alcorcón, había recibido ya cinco nuevas barredoras de bajo impacto medioambiental, cuya incorporación “supondrá una mejora del estado de limpieza de nuestra ciudad”. Así lo hacía saber la presidenta del Consejo de Administración de ESMASA, Ana Gómez. Asimismo, afirmó ser consciente de la situación actual y, por ello, desde el Consejo esperan recibir la llegada de 13 camiones de recogida de residuos, 3 furgonetas compactas, 1 furgoneta taller y 3 hidrolimpiadoras que, sin lugar a duda, mejorarán la limpieza actual del municipio: “sigue siendo necesaria la llegada de los nuevos camiones y vehículos, que esperamos puedan estar en la ciudad en marzo”.
Por su parte, el alcalde, David Pérez explica que esta situación no se ha podido mejorar antes por la falta de apoyo por parte de Podemos, Ciudadanos y PSOE ya que “hemos conseguido llegar a un acuerdo con la parte sindical para poder hacer esta operación de limpieza porque hasta para poder limpiar por la noche PSOE, Ciudadanos y Podemos votaban en contra. No nos dejan limpiar por la noche, limpiar por el día, comprar camiones, repararlos”. Pérez afirma que la presión de los propios trabajadores y de todos los vecinos ha sido la que ha hecho que “se rompiera ese bloqueo”.
Los vecinos de Alcorcón exponen que no se puede jugar con la limpieza de las calles por política ya que se daña al medioambiente y a la salud pública. “No solo es el hecho de no poder tirar tu basura dentro del contenedor o no tener sitio de pasar por la acera debido a la cantidad de basura acumulada, sino el mal olor que se mete en los pisos bajos al abrir las ventanas. Incluso en verano, hay algunas terrazas de bares que son insoportables”, con estas palabras explicaba Javier, vecino de Alcorcón, lo que supone está situación.
Después de las intervenciones del pasado día 15 de enero, parece ser que la escasa higiene en las calles de Alcorcón que se ha vuelto insostenible desde hace más de un año e incluso dos, llega a su fin gracias a la incorporación de la nueva maquinaria tras el desbloqueo de todos los partidos políticos.