Madrid registra el 16,79 por ciento de los pisos compartidos y es una de las ciudades más caras para compartir piso, después de Barcelona, con 385,37 euros al mes por una habitación, según la plataforma de búsqueda de inmuebles pisos.com.
Según el estudio la renta media nacional ha caído con respecto al pasado año un 2,30 por ciento, pasando de los 299,06 euros mensuales en 2017 a los 292,18 en 2018. Madrid y Barcelona capital aglutinan el 22,65 por ciento de la oferta, a la vez que concentran el 36,72 por ciento de la demanda.
En cuestión de género, el 55,63 por ciento de los futuros inquilinos son chicas frente al 44,37 por ciento de chicos. El grupo de edad más numeroso es el que va de los 18 a los 25 años (51,01 por ciento), seguido del intervalo de entre 26 y 35 años (29,78 por ciento). Por su parte, los inquilinos de entre 36 y 45 años representan el 10,78 por ciento de la demanda y el de los que tienen entre 46 y 60 años el 6,36 por ciento. Por último, los mayores de 60 son el grupo más reducido: 2,07 por ciento.
Según el informe, el 38,87 por ciento de los pisos compartidos se distribuye entre las provincias de Madrid (16,79 por ciento), Barcelona (15,39 por ciento) y Valencia (6,69 por ciento). En el análisis por ciudades, cinco de ellas aglutinan el 36,24 por ciento de la oferta de pisos con habitaciones en alquiler: Madrid (11,39 por ciento), Barcelona (11,27por ciento ), Sevilla (4,92por ciento), Valencia (4,42por ciento) y Granada (4,25 por ciento).
Respecto al reparto de la demanda, son las provincias de Madrid (22,73 por ciento), Barcelona (21,92 por ciento), Sevilla (6,96 por ciento), Valencia (5,08 por ciento), Málaga (4,62 por ciento), Granada (3,77 por ciento), Baleares (2,54 por ciento), Las Palmas (2,48 por ciento), A Coruña (2,36 por ciento) y Vizcaya (2,36 por ciento) las que aglutinan el 74,82 por ciento de los inquilinos que buscan habitación.
La concentración vuelve a ser un fenómeno sobresaliente en las principales capitales de provincia, puesto que Madrid (19,08 por ciento), Barcelona (17,64 por ciento), Sevilla (6,49 por ciento), Valencia (4,41 por ciento), Málaga (3,64 por ciento), Granada (3,55 por ciento), Las Palmas de Gran Canaria (2,05 por ciento), Palma de Mallorca (1,71 por ciento), Bilbao (1,70 por ciento) y A Coruña (1,48 por ciento) abarcan el 61,74 por ciento de la demanda que busca online el piso compartido perfecto.
La capital de provincia en la que resulta más caro compartir piso es Barcelona (430 euros/mes), seguida por Madrid (385,37 euros/mes), Donostia-San Sebastián (382,08 euros/mes), Palma de Mallorca (379,31 euros/mes) y Bilbao (339,41 euros/mes). En cuanto a las más baratas, el listado está encabezado por Zamora (152,23 euros/mes), teniendo por detrás a Cáceres (152,30 euros/mes), Jaén (159,88 euros/mes), Badajoz (160,25 euros/mes) y Ciudad Real (161,83 euros/mes).
Según el director de Estudios de pisos.com, Ferran Font, el alquiler compartido «viene determinado por un factor de concentración geográfica importante, dado que se trata de una fórmula estrechamente ligada a los estudiantes universitarios y a la fuerza laboral». En ambos casos, las grandes capitales son las que «aglutinan la mayor oferta de universidades e instituciones de posgrado, así como de oficinas y otros centros de trabajo».
En este sentido, el experto ha señalado que «los pisos disponibles en estas localizaciones deben competir con el alquiler turístico». No obstante, ha indicado que «se está notando cierta movilidad de los inquilinos residenciales desde las urbes de primera línea hacia municipios cercanos a las mismas, lo que implica que las subidas en las rentas se vayan extendiendo del centro a la periferia».