Este martes se ha dado cuenta al Pleno del Ayuntamiento de Majadahonda de la liquidación del presupuesto de 2017, que arroja datos muy positivos para las arcas municipales: 55 millones de euros de remanente de tesorería para gastos generales (frente a los 48,5 millones del año anterior).
Además, el resultado presupuestario ofrece el dato de 23 millones de euros que, en parte, viene determinado por la amortización anticipada de los créditos suscritos en su día por el Ayuntamiento, por valor de 11 millones de euros, logrando así para Majadahonda el objetivo Deuda Cero.
Por otro lado, estas cifras de la liquidación del presupuesto vuelven a ser reflejo de la política económica del Equipo de Gobierno «basada en la prudencia a la hora de presupuestar los ingresos municipales, principalmente en las figuras más fluctuantes, ligadas con la actividad inmobiliaria, como el ICIO y Plusvalías», según el concejal de Hacienda, Ángel Alonso.
Durante el año 2017 el Consistorio ejecutó más gasto que en 2016. En concreto, el 93% frente al 90% del ejercicio anterior. Esta mayor ejecución ha sido especialmente significativa en las áreas más sensibles, como educación y bienestar social. En el primer caso, este gasto se ha reflejado en 60.000 euros más para la contratación de servicios educativos y culturales y en más subvenciones a colegios. En el segundo caso, las ayudas a las familias se han incrementado hasta los 221.000 euros.
Además, el Ayuntamiento de Majadahonda ha vuelto reducir el IBI a todas las familias de Majadahonda, estableciendo bonificaciones importantes a las más numerosas, y situando así el impuesto en el más bajo de la historia de la ciudad.
«Esta política económica y estos resultados van a permitir reinvertir el superávit en nuevas inversiones que traeremos al próximo Pleno y que redundarán en beneficio de todos los vecinos», ha subrayado Alonso.